Castilla-La Mancha Opinión y blogs

Sobre este blog

Llega el espectáculo

A la chita callando, el aceite de oliva virgen extra antequerano Finca La Torre lo está ganando todo. Aterrizó en el sector quedando finalista en los Premios Alimentos de España al Mejor Aceite de Oliva Virgen Extra, en la categoría de ecológico, con la cosecha 2011, y desde entonces ha conquistado primeros puestos en los certámenes más prestigiosos del mundo. Este año ha ganado, con la cosecha 2013-2014, los Premios Alimentos de España al mejor AOVE tanto en la categoría de agricultura ecológica como en la tradicional, además del primer premio del Consejo Oleícola Internacional Mario Salinas al mejor aceite frutado verde intenso o si ya hablamos de la empresa, el primer premio como almazara emergente de la renombrada guía de aceite de oliva Flos Olei (el equivalente a la Michelin en restauración). Pero los premios no son nada, si el AOVE (aceite de oliva virgen extra) en boca no convence.

Me inicié con los aceites de Finca La Torre con su hojiblanca (la aceituna autóctona de la serranía malagueña), variedad que cultivan junto a la arbequina. La cosecha 2013-2014 dio como resultado un aceite de oliva hojiblanca, de aroma altamente frutado y de gran persistencia y recorrido en boca. Un zumo de oliva virgen extra fresco, con indetectables pérdidas organolépticas tras meses envasado. El hojiblanca de Finca La Torre es un singular aderezo ya que la variedad, menos conocida por el gran público que la picual o la arbequina, encaja a la perfección con muchos de los alimentos que requieren aceite en crudo para su consumo.

Respecto a la variedad arbequina, si bien conserva tras un año de elaboración el clásico aroma a almendras dulces, en boca pierde recorrido debido a la fugacidad de esta aceituna de origen catalán.

En pocos días estará envasado los zumos de arbequina y hojiblanca (se presentan en modo monovarietal) correspondientes a la cosecha 2014-2015, recientemente elaborados (ayer, por ejemplo, sin ir más lejos), aunque una servidora ha tenido ocasión de catar el hojiblanca, tanto en la versión sin filtrar como filtrado, y no puedo más que remitirme al título de este artículo: llega el espectáculo.

El artífice de estos aceites es el joven ingeniero agrónomo Victor Pérez Serrano que en apenas tres años ha logrado elaborar unos AOVE de gran calidad y que pueden competir en las plazas más difíciles del mundo con los top del zumo de aceituna.

Los AOVE de Finca La Torre son, por ahora, difíciles de conseguir. Tan solo en las cercanías de la almazara, en la provincia de Málaga, aunque la buena noticia es que a final de año estén disponibles en El Corte Inglés. Se comercializan bajo sello Demeter (agricultura biodinámica), una suerte de sello homeopático, esto es, que se elabora en comunión con la naturaleza. Respecto a la agricultura biodinámica, el escepticismo me invade pero, ¿qué duda cabe que los productos Demeter son, en boca, mucho más ricos que los demás? ¡Ahí queda!

A la chita callando, el aceite de oliva virgen extra antequerano Finca La Torre lo está ganando todo. Aterrizó en el sector quedando finalista en los Premios Alimentos de España al Mejor Aceite de Oliva Virgen Extra, en la categoría de ecológico, con la cosecha 2011, y desde entonces ha conquistado primeros puestos en los certámenes más prestigiosos del mundo. Este año ha ganado, con la cosecha 2013-2014, los Premios Alimentos de España al mejor AOVE tanto en la categoría de agricultura ecológica como en la tradicional, además del primer premio del Consejo Oleícola Internacional Mario Salinas al mejor aceite frutado verde intenso o si ya hablamos de la empresa, el primer premio como almazara emergente de la renombrada guía de aceite de oliva Flos Olei (el equivalente a la Michelin en restauración). Pero los premios no son nada, si el AOVE (aceite de oliva virgen extra) en boca no convence.

Me inicié con los aceites de Finca La Torre con su hojiblanca (la aceituna autóctona de la serranía malagueña), variedad que cultivan junto a la arbequina. La cosecha 2013-2014 dio como resultado un aceite de oliva hojiblanca, de aroma altamente frutado y de gran persistencia y recorrido en boca. Un zumo de oliva virgen extra fresco, con indetectables pérdidas organolépticas tras meses envasado. El hojiblanca de Finca La Torre es un singular aderezo ya que la variedad, menos conocida por el gran público que la picual o la arbequina, encaja a la perfección con muchos de los alimentos que requieren aceite en crudo para su consumo.