Espacio de divulgación científica y tecnológica patrocinado por la Universidad de Alcalá (UAH), con el objetivo de acercar el conocimiento y la investigación a la ciudadanía y generar cultura de ciencia
“El abejero europeo puede ser un aliado contra la avispa asiática en España”
¿Pueden determinadas aves convertirse en solución natural para atajar la proliferación de la avispa asiática en el norte de España? La respuesta la tienen los investigadores del grupo FORECO (Forest Ecology and Restoration Group) que lidera la investigación multidisciplinar ‘Evaluación de funciones y servicios ecosistémicos de la avifauna en sistemas agroforestales’, financiada por el Ministerio de Ciencia e Innovación.
Desde el año 2018, en la Universidad de Alcalá (UAH) investigan acerca de la efectividad del abejero europeo (Pernis apivorus) para combatir a la Vespa velutina o avispa asiática. Se trata de un ave rapaz de tamaño mediano especializada en el consumo de himenópteros, principalmente las avispas. En concreto las larvas y pupas que se encuentran en los panales.
“Podría ser un aliado para el control de avispas exóticas, como la asiática”, explica Salvador Rebollo, profesor titular de Ecología en el Departamento de Ciencias de la Vida en la universidad alcalaína, quien matiza que, para lograrlo “sería necesario incluir al ave en un sistema de control integrado de plagas donde se tengan en cuenta otros métodos complementarios”.
En todo caso, los investigadores han constatado que es un “depredador eficaz”. Es uno de los descubrimientos de una investigación que se prolongará durante tres años más. “Hemos comprobado en 20 parejas de esta especie que son grandes consumidores de estas avispas”. Y no solo eso. También han podido determinar que la avispa asiática es ya la segunda presa más importante en la dieta de estas aves rapaces.
Salvador Rebollo explica cómo esta especie “cuenta con adaptaciones para atacar a los avisperos. Los destruyen y se llevan trozos de los panales para alimentar a sus crías”.
Un método de control natural “sin efectos negativos colaterales”
Actualmente la avispa asiática “está incluida en la lista de especies exóticas invasoras más preocupantes en la Unión Europea, de ahí la necesidad de establecer estrategias de control”, comenta el investigador.
Estas estrategias pasan, por un lado, por la eliminación de los avisperos a través de la acción directa de bomberos, policías y equipos especializados o del trampeo para el control de ejemplares ‘reina’ durante la primavera, una vez que salen de la hibernación.
Por otro, existen métodos basados en el uso de biocidas (pesticidas) o insecticidas. “Existe un riesgo importante de que se transmitan a la cadena trófica, afecten a los depredadores de la avispa y se propaguen al conjunto del ecosistema”, advierte.
Esta última es la razón de la búsqueda de métodos de control alternativos “que no tengan estos inconvenientes. El abejero es un depredador especializado en el consumo de véspidos que no tendría efectos negativos colaterales”.
La investigación se centra ahora en lograr nuevos descubrimientos mediante la colocación de emisores- satélite en los adultos de abejero europeo. “Nos permitirá saber cómo se comporta, a qué tipo de colonia de avispas asiáticas ataca, cuál es el grado de destrucción que provoca y además aspectos relacionados con la migración y su invernada en África”.
El abejero europeo no come abejas, se centra en las avispas
Contrariamente a lo que su nombre sugiere, el abejero no come abejas. Al menos no lo hace con los ejemplares adultos, y en cuanto a las larvas, el diseño milenario de las colmenas (la mayoría ya son abejas domésticas) impide que el ave acceda a ellas. Así que se centra en todo tipo de avispas.
Los investigadores estudian su importancia en los ecosistemas, en particular en el papel que juega como depredador. “Queremos saber cómo influye ese servicio que presta en el bienestar humano”.
Sin embargo, “es una especie relativamente poco abundante”, explica el ecólogo. El último censo data de 2010 y sugiere la existencia de más de 700 parejas en Galicia, si bien el abejero se distribuye por toda la cornisa cantábrica. Los datos, advierte Rebollo, “están desactualizados”.
La distribución de la rapaz en Europa se limita, casi exclusivamente a lugares de ambiente húmedo. “Penetra peor en el interior de España allí donde hay un ambiente más mediterráneo. Los veranos secos, sobre todo si son prolongados, limitan a esta ave. Solo aparecería por ejemplo en la Sierra de Madrid o en el Sistema Ibérico, pero en menor densidad”, detalla el profesor.
Los investigadores han podido constatar que el número de parejas reproductoras de abejero europeo ha aumentado un 300% desde que la avispa asiática ha colonizado el área de estudio situada en las Rías Bajas, en la provincia de Pontevedra. De momento, se desconocen cuántos ejemplares serían necesarios para controlar la también creciente presencia del insecto.
“Los hábitats que colonizan coinciden, por pura casualidad, con los de la avispa asiática que está teniendo dificultades para llegar al interior de la Península y lo hace, precisamente, a través de las sierras”.
En el proyecto de investigación participa un equipo multidisciplinar con investigadores y colaboradores de la UAH como Luisa María Díaz, entomóloga de la unidad de Zoología; Melina Barrio, economista especializada en economía ambiental; el toledano Jorge Ángel Martín, contratado predoctoral; y José Manuel Fernández, naturalista y ornitólogo.
“Necesitamos ecólogos, biólogos, zoólogos especializados en aves y en insectos, matemáticos y economistas porque se evalúa el servicio económico que prestan estas aves. Este es un paso muy importante en el proyecto. No solo estudiamos las funciones y los servicios de las aves, sino que lo evaluamos económicamente. Así podemos transmitir mejor su importancia”.
Sobre este blog
Espacio de divulgación científica y tecnológica patrocinado por la Universidad de Alcalá (UAH), con el objetivo de acercar el conocimiento y la investigación a la ciudadanía y generar cultura de ciencia
0