15 de junio de 2015. Se celebra una concentración en contra del cierre de los CIES, los Centros de Internamiento de Extranjeros en Cuenca sumándose así a una protesta que se realizaba en todo el país. Los manifestantes, unos 40, se concentraban en una zona peatonal, en la en la plaza de la Hispanidad de la ciudad. Una protesta no demasiado numerosa, sin ni siquiera presencia policial.
La sorpresa llegó un mes después, ya que el 27 de julio una de las activistas participantes, Raquel Iniesta, militante de IU recibió una notificación de sanción y la carta de pago de 3.000 euros por parte del Ayuntamiento de Cuenca, donde acababa de asumir funciones de Gobierno el Partido Popular bajo la dirección de Ángel Mariscal.
La denuncia, formulada por un agente de la Policía Local, le acusa de “modificar el contenido de las señales o colocar sobre ellas o en sus inmediaciones placas carteles marcas u otros objetos”.
La multa alude a la concentración con fecha del día 15 de junio a las 8.45 horas y en la plaza de la Constitución cuando, según los organizadores, se produjo ese día “pero a las ocho de la tarde y en la plaza de la Hispanidad donde no existe señal ni placa que pueda ser modificada al tratarse de una calle peatonal”, según explica la propia Raquel Iniesta en Change.org, la plataforma de recogida de firmas donde busca el apoyo social para que, ahora, el Ayuntamiento de Cuenca le retire la sanción.
Iniesta se pregunta por qué no le fue notificada la multa en ese momento “si la autoridad local fue testigo de la infracción” y cree que el consistorio fue a sancionar, precisamente, “a la persona que legalizó la concentración”. Según la activista, “esto tiene nombre, represión”.
La afectada ha presentado ya dos veces alegaciones para evitar la sanción, las últimas el pasado 30 diciembre por la que consideran una “falsa denuncia” y esperan que se anule el expediente. De no ser así, “seguiremos saliendo a la calle y no guardaremos silencio ante las desigualdades que genera este sistema capitalista”.
Este jueves, Podemos Cuenca se sumaba a la protesta por la multa que, asegura, se interpuso bajo “acusaciones falsas” y ha pedido al alcalde que retire la multa. Aurelio Sáiz, secretario general de Podemos Cuenca, corrobora la versión de Iniesta y ha pedido a Ángel Mariscal que “se replantee su actitud” porque la penalización “no tiene ni pies ni cabeza”.
Además, recuerda, “ya hemos sufrido numerosas sanciones de esta persona en los últimos años que buscaban desactivar las protestas contra los recortes” por parte de quien, dice, ocupaba con anterioridad el puesto de subdelegado del Gobierno central en Cuenca.
“Parece que a Ángel Mariscal le gustan las multas”, dice el líder provincial de Podemos y lamenta que, en el fondo, haya conseguido su objetivo ya que “ha logrado generar miedo entre la gente y amordazar”.