Los trabajadores del Centro de Menores Infractores Albaidel de Albacete denuncian que la Consejería de Bienestar Social pretende reducir el número de guardias de seguridad del centro. Este recorte del personal se contempla en el pliego de condiciones que ha preparado el gobierno regional y que va a regir la contratación del servicio de seguridad y vigilancia. Se trata de una reducción importante en los efectivos de seguridad pasando de 20 a 15 incidiendo en la jornada diurna que pasaría de los cinco efectivos de seguridad con los que a día de hoy cuentan a sólo tres.
Aventuran una situación de inseguridad que puede derivar en graves riesgos tanto para los trabajadores como para los chavales que se encuentran internos en el centro.
Esta reducción de personal que contempla el nuevo pliego de condiciones va en contra de las recomendaciones que hizo en su memoria del 2013 la Defensora del Pueblo donde se planteaba la conveniencia de incrementar el personal de vigilancia tras la muerte de un menor de 15 años en su habitación de este Centro de Menores.
Para intentar evitar el recorte en personal de vigilancia los trabajadores han iniciado una serie de actuaciones,“ queremos reunirnos con los responsables de este centro en la Delegación de Servicios Sociales, hemos solicitado unas entrevistas y queremos que nos atiendan para consensuar con ellos estos problemas”, explica José María Muñoz, delegado sindical de los vigilantes del Albaidel. De hecho, según Muñoz, sólo el año pasado contabilizaron 300 intervenciones que en un caso permitieron salvar la vida de une menor. A día de hoy, el centro tiene internos 25 internos, la mayoría de edades comprendidas entre los 17 y 19 años.
El miedo de los trabajadores
Vicente Amores lleva 28 años trabajando en este centro como monitor y nunca pensó que se plantearía pedir un traslado. Hoy habla con miedo y no entiende cómo pueden pensar en reducir el personal de seguridad: “Si nos dejan con tres guardias de seguridad, uno de ellos se tiene que ocupar de la sala de cámaras donde se vigila las 24 horas del día, sólo quedan dos guardias para el resto de trabajo de prevención. ¿Qué hacen sólo dos personas si se da un motín? ¿O si hay que separar a varios chavales en mitad de una pelea? Nos van a pegar allí algún día”.
Siente miedo por sí mismo y también por los internos, pero sobre todo rabia por los pasos hacia atrás que ha visto en los últimos años: “esta gente (refiriéndose al gobierno regional) no se ha dignado a venir a vernos, desde Toledo dicen vamos a quitar personal, pero no saben como estamos. Les da igual todo, nos han quitado todo incluso el personal de seguridad del centro”.
El informe del Defensor del Pueblo
Tras el fallecimiento en septiembre de 2013 de un menor de quince años en su habitación del Centro de Menores Infractores Albaidel dos técnicos del Defensor del Pueblo se desplazaron hasta el centro. Tras la visita la Institución emitió un informe donde se solicita al centro la revisión del protocolo interno de su funcionamiento, proponiendo el “ incremento de la plantilla de personal con el fin de que cada profesional, tanto personal de vigilancia como técnicos de atención al menor, puedan dar efectivo cumplimiento a las tareas encomendadas, informando, en todo caso, de las medidas que piensan adoptarse, tanto a nivel personal como de medios materiales para evitar que se repitan hechos como el sucedido”.