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Desalojan un bloque de viviendas públicas en Guadalajara por grietas en su estructura

La consejera de Fomento, Agustina García Élez, ha señalado que para el Gobierno de Castilla-La Mancha la prioridad es la seguridad de los vecinos del inmueble de GICAMAN desalojado en Guadalajara y ha emplazado a conocer el informe de los técnicos para conocer el alcance de las deficiencias antes de que estas personas puedan regresar a sus hogares.

Así lo ha manifestado en la visita que ha realizado a este edificio de 48 viviendas de una promoción de la empresa pública Gestión de Infraestructuras de Castilla-La Mancha (GICAMAN), del año 2005 y situado en la calle Laguna de la Colmada. “No hay mejor cosa que ser prudente cuando se trata de la seguridad de las personas, donde todos los esfuerzos son necesarios”, ha señalado la consejera, quien ha añadido que desde el Gobierno de García-Page se está actuando “con prudencia y rapidez para que la gente regrese, siempre que así se indique por parte de los técnicos, a sus casas de forma segura”.

En todo momento, Agustina García Élez ha emplazado a garantizar esta seguridad previos informes de los técnicos, ya que serán los que harán “una valoración más allá de la nuestra”, porque “esta valoración técnica dirá el alcance y marcará la hoja de ruta de las actuaciones que haya por delante”.

La consejera ha recordado que fue alrededor de las 22 horas de este miércoles cuando se recibió la llamada de un vecino alertando de la aparición de grietas en su domicilio, momento en los técnicos del Gobierno regional, a través de la Delegación de Guadalajara, se personaron mientras se procedía al desalojo del inmueble por parte de la Policía Local y los bomberos. García Élez ha insistido en que se tomó está medida por el “mínimo riesgo de que pudiera ocurrir algo y para evitar cualquier otro desperfecto que se pudiera provocar”.

Haciendo un repaso cronológico, la consejera ha explicado que desde el día 31 de diciembre se lleva trabajando “intensamente” en este edificio. Se contrató a una empresa técnica, tras la aparición de una serie de grietas centralizadas en una escalera central, para que realizara un informe exhaustivo para llegar a las causas y valorar las posibles soluciones. El 4 de enero se personaron asistencia y personal técnico para hacer catas, mediciones y poner testigos; trabajos que, inicialmente, determinaron que “no hay un problema estructural”, aunque “hay que esperar al informe definitivo y mientras continúan los trabajos”.

Agustina García Élez ha detallado que esas grietas han avanzado en las últimas 24 horas, por lo que “se ha procedido al desalojo” y “en ningún momento vamos a permitir que los vecinos vuelvan a sus domicilios hasta que tengamos la certeza y la seguridad de que no hay ningún problema estructural, más allá de los que ya existen”. En todo momento, la consejera no ha querido aventurarse sobre posibles causas hasta conocer los informes definitivos de los técnicos y, así, poder trasladar el alcance a los afectados. 

“Nuestra prioridad es la seguridad de las personas”

Por su parte, el alcalde de Guadalajara, Antonio Román, ha asegurado que él mismo fue quien ordenó el desalojo del edificio porque “lo primero es la seguridad de las personas”. Además, ha explicado, que se acordó un realojamiento de emergencia a las familias; de estas, 36 personas -20 de ellas menores-, han sido realojadas en pensiones, hostales y hoteles de la ciudad, y el resto se han alojado en pisos de familiares.

Según el alcalde, en el momento en el que se tenga el informe que se haga “se tomarán decisiones futuras”, pero de momento el edificio está precintado y desalojado. Y aunque ha avanzado que “esto podría cambiar”, ha incidido en que, sólo volverán a las viviendas si “los informes los técnicos municipales aseguran que no existe riesgo para las personas”.

El propio alcalde ha reconocido que, al tratarse de viviendas públicas de carácter social y de titularidad de una empresa dependiente del Gobierno de Castilla-La Mancha, se puso él mismo en contacto con el delegado de la Junta en Guadalajara, Alberto Rojo, para que también evaluasen los daños.