García-Page rechaza reformar el delito de sedición y “cambiar las reglas del juego a mitad del partido”

El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, vuelve a confrontar con Pedro Sánchez en sus negociaciones con el independentismo catalán. En esta ocasión, ha dicho no compartir el planteamiento de reformar el delito de sedición. “Lo digo con serenidad y con tranquilidad”, ha destacado, aunque dejando claro su rechazo a “cambiar las reglas del juego a mitad de partido”.

“Esto no significa para nada que no busquemos entre todos la mayor convivencia en Catalunya y de la parte más independentista con el resto de España. Ojalá, ese es el objetivo, conseguir la convivencia. Me temo que el camino de dejarles las soluciones a quienes tienen como propósito romper la convivencia no es el camino correcto”.

Por ello, ha defendido trabajar por un escenario “en el que quede muy claro en España que el que quiera volver a intentar una cosa así tiene que entender que las consecuencias no son sólo políticas, retóricas o de titulares de prensa”. Ha recordado García-Page que esas consecuencias son “penales”.

“Lo que más me preocupa es que yo creo que este debate hoy no toca. Porque lo que me gustaría es que se cumpliera el primer objetivo de todos, que Puigdemont viniera a España y se sometiera con las mismas normas, como hicieron Junqueras y los demás, a los Tribunales de Justicia españoles, no cambiar las reglas del juego a mitad de partido. Por justicia básica elemental, los que están fugados tienen que venir. Primero, Puigdemont aquí. Y luego hablamos de cómo tipificar futuras intentonas a futuro”, ha concluido.