“Salimos contentos de que se nos recibiera con tanta premura, al día siguiente de haberlo solicitado. Eso demuestra la importancia que tiene el colectivo médico para las autoridades”.
Así ha valorado Raúl Calvo, secretario del Consejo Autonómico de Colegios de Médicos de Castilla-La Mancha, la reunión de urgencia mantenida con el presidente de Castilla-La Mancha a raíz del “malestar” denunciado por el colectivo médico por unas palabras de Emiliano García-Page en las Cortes regionales.
“Queríamos una aclaración sobre las palabras del presidente, y la interpretación que se había hecho de ellas, que tanto malestar ha generado entre el colectivo”.
Según Calvo, el propio presidente les dijo estar “asombrado” por la interpretación que se había hecho ya que, aseguró en el encuentro, “durante su intervención en las Cortes pidió varias veces disculpas a los sanitarios por la falta de medios y había destacado nuestro trabajo desde el principio”, relata.
“Le dejamos constancia de la profesionalidad con la que ha trabajado el colectivo y, sobre todo, de su falta de responsabilidad en cuanto al abastecimiento de material sanitario”. El presidente les confirmó, según Calvo, que “nunca se ha rechazado la responsabilidad del Gobierno en cuanto al abastecimiento de material y que lo asumía ante la ciudadanía si así había sido”.
Y es que, los médicos no ocultan su preocupación por el hecho de que no se haya valorado el esfuerzo de los profesionales, en particular los que se ocupan de los pacientes críticos en las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) y en las Unidades de reanimación del Servicio de Anestesia. “Puede haber una incitación a la ciudadanía a denunciar a los médicos, por su actuación en la asistencia y tratamiento a los pacientes en las condiciones de penuria de recursos que ha conllevado esta pandemia”, señala el Consejo Autonómico de Colegios de Médicos.
Una de las cuestiones más polémicas durante la intervención en el pleno de las Cortes fue relativa a los respiradores. García-Page no admitió que hubiera faltado este tipo de tecnología sanitaria, aunque invitaba a “evacuar denuncia” si alguien podía constatarlo. “Es verdad que podía interpretarse, pero lo que se dijo es que se denunciara a los responsables, que son ellos, las autoridades, si así había ocurrido”, reconoce Calvo.
“Lo que no queríamos es que quedaran dudas en la ciudadanía: la responsabilidad de la falta de medios no debe recaer en los médicos”, insiste, para recalcar que “todo el mundo ha actuado de buena fe y de eso no me cabe ninguna duda”.
Sobre el comunicado por parte del Consejo de Médicos de Albacete de estudiar jurídicamente “posibles ilegalidades” derivadas de las palabras del presidente regional, hoy el colectivo albaceteño y tras el encuentro con los representantes del Consejo Autonómico, no ha decidido todavía si mantendrá esa intención.
“Lo tendrá que decidir la Junta directiva. El comunicado es tal cual y creo recordar que se pide unas disculpas públicas. ¿Se han producido?”, señalan fuentes del colegio albaceteño.
Participarán en la elaboración de una ley de reserva estratégica de material sanitario
También se han pronunciado sobre el anuncio de García-Page de desarrollar una ley de reserva estratégica de material sanitario para afrontar con más garantías un posible rebrote de la pandemia. “Nos parece razonable”, asegura Calvo, ya que de la reserva de material sanitario “depende nuestro trabajo”.
¿Preocupa la posible falta de material mientras llega esa ley?, preguntamos. “Nos ha preocupado desde el minuto uno. No hemos sido ajenos a las dificultades de acceso al mercado que ha habido y entendemos las explicaciones cuando nos las han dado, pero no podemos hacer otra cosa que exigir la provisión. Mientras tanto, hemos trabajado con lealtad hacia la ciudadanía y hacia el sistema público para el que trabajamos”.
En todo caso, la presidenta del Consejo, Natividad Laín, ha subrayado que durante el encuentro también se expuso que los médicos castellanomanchegos son partidarios de mantener “fuera del debate político”, cuestiones altamente especializadas como los protocolos diagnósticos y terapeúticos cuya discusión, sostienen, “debe quedar en el plano estrictamente profesional y científico”.