El área LGTBI de Izquierda Unida en Castilla-La Mancha ha presentado una batería de mociones que esperan que sean firmadas por los concejales y portavoces municipales de la formación en los municipios de la comunidad y por la que, aprovechando que el 23 de octubre es el Día Internacional por la Despatologización de las Identidades Transexual y Transgénero, se pide tanto al Gobierno nacional como al Gobierno regional que deje de considerar como enfermos a este tipo de colectivo, ya que de hecho aún está registrado en la Clasificación Internacional de Enfermedades como un trastorno de disforia de género y se considera un trastorno mental.
El estar registrado como una enfermedad hace que sufran diversos inconvenientes sociales, como por ejemplo tener tutelación médica en los procesos con la Seguridad Social o que estén mal vistos y sufran rechazo por determinados ámbitos de la sociedad, como en sus centros de trabajo, estudio, centros de salud e incluso lugares públicos y relaciones sociales.
El colectivo considera unos graves inconvenientes los que sufren por esta clasificación y valoran como uno de los motivos por los que decidan acudir a la medicina privada para sus procesos e incluso que tengan que acabar en la prostitución por el rechazo laboral que sufren.
Considerando que sus peticiones están avaladas por la Declaración Universal de los Derechos Humanos, diversas decisiones del Consejo de Europa y siendo además instauradas por algunos gobiernos nacionales como es el caso de Argentina, el colectivo pide que se elimine la “estigmatización” que sufren estas personas, que actualmente no pueden ser tratadas por los servicios médicos autonómicos porque no tienen estas competencias las comunidades, en materia de sanidad a transexuales es el Gobierno nacional quien conserva las competencias. Consideran que el conceder las competencias a comunidades sería un gran paso puesto que acercaría y haría accesible los servicios sanitarios y sociales que necesitan, un colectivo que también ha sufrido en primera personas los recortes realizados especialmente en sanidad.
Por ello piden al Partido Popular en ambos gobiernos que expliquen por qué mantienen una postura de oposición en avances hacia este colectivo así como soluciones que dejen de considerar a estos ciudadanos personas “de segunda”.
La moción pide por un lado al gobierno de Cospedal una Ley Integral de Transexualidad que recoja las demandas de las personas transexuales, al de Rajoy que defienda en los foros internacionales la despatologización de estos casos y que dé servicio asistencial en las comunidades manteniendo de forma accesible y gratuita el proceso de reasignación de sexo, entre otros puntos. Esta moción una vez firmada por los altos cargos del partido en los municipios de Castilla-La Mancha se presentará al gobierno central y autonómico.