El Gobierno de Castilla-La Mancha ha decidido poner fin a una de las polémicas heredadas de la legislatura anterior referente a los trabajadores sanitarios. Según ha anunciado el portavoz de la Junta, Nacho Hernando, el presidente Emiliano García-Page ha dado orden de retirar el recurso de casación que el Gobierno anterior de María Dolores de Cospedal había interpuesto contra la anulación del Plan de Recursos Humanos del SESCAM, que exigía al personal una jubilación forzosa a los 65 años. De esta forma, el personal sanitario podrá ahora solicitar una ampliación de esta edad de jubilación.
Hernando ha resaltado que esta decisión permitirá que se siga poniendo en valor la labor de “excelentes profesionales con mucha experiencia” a los que el anterior Ejecutivo “jubiló de forma arbitraria”. “Debemos saber valorar el capital humano del que se dispone en la sanidad pública”, ha destacado, manifestando el compromiso del Gobierno a realizar una “retención de talento”. De hecho, el portavoz ha explicado que las jubilaciones forzosas decretadas por Cospedal se realizaron con un “afán de recortar” ya que las plazas de los ya jubilados no eran sustituidas.
También ha adelantado que el Gobierno trabaja ahora para elaborar un texto legal que permita la prórroga de jubilación de todos los trabajadores que “por voluntad o por lealtad al trabajo público” quieran trabajar más allá de los 65 años.
Con esta decisión, el Gobierno se alinea con la postura defendida en su momento por el gremio médico. El Colegio de Médicos de Toledo ya se posicionó en contra de ese Plan de Recursos Humanos puesto que con ello el SESCAM prescindía de la profesionalidad y experiencia de trabajadores altamente cualificados.