Al terminar el 2021, la región seguía siendo la comunidad autónoma en la que menos personas jóvenes pudieron independizarse del hogar familiar: sólo el 10,8% de la población joven lo había logrado. Es un “mínimo histórico, tanto a nivel autonómico como estatal”, advierten desde el Consejo de la Juventud, que presentó estos datos dentro de su último Observatorio de Emancipación. “Esta emancipación residencial tan residual no solo podía atribuirse a un único factor, pero el mercado de trabajo era uno de ellos”, señalan.
Según los datos del Consejo, el 55,0 % de la población joven que estaba trabajando y había completado estudios superiores estaba sobrecualificada en su puesto de trabajo, ya que las dos ocupaciones más habituales entre la población joven son los que se dedican a servicios de restauración, personal, protección y vendedores, así como a las llamadas “ocupaciones elementales”.
Sendas categorías, explican desde el Consejo de la Juventud de España, aglutinan a más del 40% de la población joven de Castilla-La Mancha que había conseguido un trabajo, con un salario medio de apenas 990 euros netos al mes (11.836,31 euro anuales). “Con este bagaje, acceder al mercado de la vivienda era una alternativa poco viable para la mayoría de las personas jóvenes”, lamentaron. Y, advertían, no se debe a los precios medios, sino porque se exige una “solvencia y estabilidad económica que suelen estar fuera de su alcance”. Eso sí, la región es la comunidad en la que más personas jóvenes se han emancipado a través de una compra de vivienda con una hipoteca: el 27,4% de las personas emancipadas lo hicieron así. “Este colectivo de personas jóvenes representaba a la minoría que contaba con un poder adquisitivo comparativamente superior y una posición laboral relativamente sólida”.
Las explicaciones de la Junta
Carlos Yuste, director general de Juventud y Deportes, declaró ante EFE que estos datos contrastan “fuertemente” con el paro juvenil de la región, que ha ido bajando. “Castilla-La Mancha cerró el pasado año con la menor tasa de paro en comparación con el resto del país”. Además, ha señalado que existe un “fuerte arraigo familiar” lo que “condiciona” la emancipación más tardía“, según cita EFE.
Por otro lado Yuste aclaró que se están llevando a cabo “diferentes” políticas para ayudar a facilitar la emancipación de los jóvenes como la formación de empleo joven, a la que se destinan 40 millones de euros al año, así como las ayudas para el contrato de jóvenes, para las que destinan 5.000 o 6.000 euros a los menores de 25 años que son contratados a jornada completa por, mínimo, un año. Además, ha destacado que desde 2015, más de 8.000 jóvenes se han beneficiado de las ayudas del Gobierno regional en materia de empleo joven, “lo que contrasta con los datos del Observatorio del CJE”, según señalan desde la agencia EFE.
“Desde la administración, debemos prestar las posibilidades para que esta emancipación no dependa solo y exclusivamente de cuestiones económicas y que, quien quiera emanciparse, tenga la posibilidad de hacerlo en nuestra región al menos con las mismas posibilidades que el resto del país”, resaltó ante la agencia.