Jesús Labrador, candidato al Ayuntamiento de Toledo en las próximas elecciones y actual delegado de Gobierno en Castilla-La Mancha, fue el encargado de dirigir la Comisión Regional de seguimiento del Plan Especial de Empleo en Zonas Rurales Deprimidas. Este proyecto cuenta con un presupuesto de más de nueve millones de euros, y que creó, según informa la Delegación de Gobierno, 2.935 puestos de trabajo en 2014, los que se repartieron en 292 pueblos de Castilla-La Mancha.
Según Labrador, los puestos de trabajo se distribuyeron adaptando las directrices acordadas en el Gobierno del Partido Popular en 1997. Con esto, aseguraba el Delegado de Gobierno, se pretendía lograr que las ayudas llegasen realmente a las zonas deprimidas. En la reunión se trataron temas como la distribución de créditos según provincias, para potenciar la contratación de trabajadores en paro.
Comisiones Obreras ha vuelto a señalar que los fondos que recibe la región para este plan son insuficientes, sobre todo dado que el Gobierno regional no aporta nada en materia económica. Demetrio Muñoz, secretario regional de Acción Sindical de la Federación Agroalimentaria del sindicato, ha señalado que es una “actitud inaceptable” por parte del Ejecutivo de Cospedal, ya que sin su ayuda se crean menos puestos de trabajo para un Plan cuya importancia en la región ha destacado. “Generan un importante volumen de empleo para los asalariados del campo en los períodos de poca actividad agraria”, ha señalado Muñoz.
Durante la presentación de este Plan de Empleo, en mayo de 2014, no fue Jesús Labrador quien presidió dicho acto, sino María Dolores de Cospedal. Esto, a pesar de que, tal como señalan los sindicatos, el Gobierno regional no ha aportado nada en términos presupuestarios para el proyecto. Comisiones Obreras ha exigido también que se agilicen “al máximo” los mecanismos para que los proyectos que darán empleo a los asalariados agrícolas se aprueben cuanto antes.