Este blog se dedicará a hablar de uno de los fenómenos más incipientes de la actualidad: el mundo seriéfilo. Recomendará, analizará y traerá curiosidades de series de televisión estadounidenses, británicas, europeas y de otros países del mundo.
¿Hay vida después de la muerte? ¿Qué harías si tuvieras una segunda oportunidad?¿Cómo la utilizarías? Los dramas sobrenaturales, con la vuelta a la vida de por medio, llevan gozando de mucha popularidad desde hace unos años. La francesa ‘Les Revenants’, y su remake, es lo que más os sonará y quizás también la americana ‘Resurrection’. Esta vez dejo de lado a los zombies (‘The Walking Dead’, ‘iZombie’ o ‘Z Nation’) para escribir sobre un tipo de ficción que explota la resurrección desde otro punto de vista y más centrado en el dolor y/o felicidad de encajar o reflexionar sobre la vuelta de unas personas -y por qué no otras- como si el tiempo solo se hubiera detenido para ellos un solo segundo. Esta vez, viajaremos hasta las antípodas australianas para reseñar ‘Glitch’ de la cadena ABC1, un interesante producto audiovisual que ya ha renovado por una segunda temporada.
Yoorana, pequeña localidad del interior de Australia, ve alterada su cordial tranquilidad cuando James Hayes (Patrick Brammall), jefe de policía, recibe un reporte sobre unos disturbios en el cementerio. Allí se encuentra a varias personas que vagan miedosas, desorientadas y desnudas. Estas no recuerdan ni quiénes son y ni qué hacen allí.
Todo se volverá más complejo cuando James reconoce a Kate (Emma Booth) su esposa, que murió años atrás. Él y la doctora Elishia McKeller (Genevieve O´Reilly) deciden ocultar y proteger a estas personas, vinculadas irremediablemente con el pasado de Yoorana; además de indagar sobre el porqué y el cómo de estas resurrecciones.
La ficción obtiene de un hecho misterioso y sobrenatural una narración sencilla y efectiva, apartando mecánicas variopintas y religiosas para centrarse en la cotidianeidad. El enigma se instala en la vida tranquila de un pequeño pueblo, sin sobresaltos, de ahí lo interesante de ‘Glitch’. A través de aquí se abren una serie de interrogantes que sacuden a los protagonistas y al propio espectador. Cuestiones que se irán resolviendo poco a poco con la llegada de un final tremendamente sorpresivo y, que deja las líneas argumentales preparadas para la segunda temporada.
El regreso de los resucitados supone choque y unión de pasado y presente, ya que cada uno de ellos está ligado de alguna manera a Yoorana. Un ‘corte’ en la vida de los vivos que les supondrá un duro trance ya que se ven envueltos en una especie de eterno retorno. Mientras, los que retornan tendrán que enfrentarse a sus recuerdos, secretos y al dolor de saber la ‘verdad’. Así la narración se va enriqueciendo de matices y complejidad a la vez que la memoria de cada uno de ellos se va dilucidando.
Mientras que la narración va revelando poco a poco el pasado de los retornados y el misterio que los une a todos, ‘Glitch’ también tiene un gran componente social e histórico australiano. Se tratan temas como la xenofobia y la relación con los aborígenes (aprovecho para recomendar ‘Redfern Now’), la mujer, la Primera Guerra Mundial, la homosexualidad o el amor, entre otras cosas. Lo interesante es la comparación o evolución de estos asuntos, como les ha marcado y, por último, verlo desde nuestra perspectiva que es la misma que la de los ‘vivos’ en la serie.
La serie rompe y juega -a su manera- con el esquema clásico de este subgénero y se desenvuelve con una narración clara y directa. Una dirección sin demasiados artificios que conjuga con una fotografía con preponderancia de tonos ocres. Como resultado obtiene un drama sobrenatural muy competente e interesante que hará las delicias para aquellos que quieran salirse del mercado habitual.
¿Hay vida después de la muerte? ¿Qué harías si tuvieras una segunda oportunidad?¿Cómo la utilizarías? Los dramas sobrenaturales, con la vuelta a la vida de por medio, llevan gozando de mucha popularidad desde hace unos años. La francesa ‘Les Revenants’, y su remake, es lo que más os sonará y quizás también la americana ‘Resurrection’. Esta vez dejo de lado a los zombies (‘The Walking Dead’, ‘iZombie’ o ‘Z Nation’) para escribir sobre un tipo de ficción que explota la resurrección desde otro punto de vista y más centrado en el dolor y/o felicidad de encajar o reflexionar sobre la vuelta de unas personas -y por qué no otras- como si el tiempo solo se hubiera detenido para ellos un solo segundo. Esta vez, viajaremos hasta las antípodas australianas para reseñar ‘Glitch’ de la cadena ABC1, un interesante producto audiovisual que ya ha renovado por una segunda temporada.
Yoorana, pequeña localidad del interior de Australia, ve alterada su cordial tranquilidad cuando James Hayes (Patrick Brammall), jefe de policía, recibe un reporte sobre unos disturbios en el cementerio. Allí se encuentra a varias personas que vagan miedosas, desorientadas y desnudas. Estas no recuerdan ni quiénes son y ni qué hacen allí.