Los cinco integrantes de 'La Manada', acusados por abuso sexual a una joven durante las fiestas de San Fermín del 2016, así como al juez Ricardo Javier González, que pidió la absolución de los cinco condenados, ya son personas 'non gratas' en la localidad guadalajareña de Pozo de Guadalajara.
Todos los ediles del Ayuntamiento dieron su apoyo en la sesión plenaria celebrada a las 20.00 horas de este miércoles a la moción presentada en este sentido por el alcalde, Teo Baldominos. El primer edil ha explicado que este título simbólico se hará efectivo en su totalidad la próxima semana, una vez se apruebe al acta de la sesión plenaria.
El título de persona 'non grata' emana de la jurisdicción diplomática y está legislado en el Convenio de Viena, por el cual un Estado puede vetar la entrada a un diplomático a su país. Aunque fuera de este uso diplomático no tiene consecuencias jurídicas, sí “significa y manifiesta públicamente una expresión de repudia, que indica que el sujeto no es bien recibido en el pueblo”, como explicitaba la moción.
La moción aprobada apunta que el fallo que impone una pena de nueve años a los acusados al considerar los hechos como un delito de agresión sexual continuado, en lugar de un delito de violación, como pedía la Fiscalía, “desmonta el inmenso trabajo jurídico y político de haber conceptualizado la violencia de género como una parte importantísima de la protección de las mujeres en la democracia”.
Aunque asume que las personas que ostentan cargos públicos no son jueces por mucho que puedan disentir y muestra el “respeto de la Corporación municipal hacia la justicia española y sus magistrados”, no alcanza a entender que “uno de sus miembros pidiera la absolución de cinco individuos capaces de actos tan repugnantes, ni que vea un acto sexual consentido donde, claramente, se ha acreditado en sentencia que se ejerce una superioridad y sometimiento de la víctima”.
Lamenta que “el famoso video de 96 segundos de duración en un acto que duró casi 1.200 segundos” no haya logrado una condena de violación para los agresores, de los que destaca la “humillación a la que someten a una chica en inferioridad numérica y física” y sus mensajes en el grupo de Whastsapp, que “prueban una falta de respeto y de valores absoluta, incluso mas grave cuando dos de ellos están formados para defender al que no se puede defender solo”.
En la moción, el primer edil de Pozo de Guadalajara recuerda el caso de Nagore Laffage, quien en 2008 fue asesinada por José Diego, cuando después de subir en un ascensor, se besaron y acariciaron, y cuando la mujer se negó a practicar sexo el hombre acabó asesinándola. “En el caso de 'La Manada' se ha descartado la violencia, pero la ausencia de intimidación resulta difícil de comprender”, indica el alcalde en el texto.
En él se pregunta “qué debemos explicar ahora a nuestras jóvenes” y se muestra avergonzado por lo ocurrido. “Nos sentimos responsables sin serlo y como representantes públicos debemos hacer algo, aunque sea algo simbólico, debemos trasmitir a la sociedad que podemos cambiar las cosas”, manifiesta, convencido de que no pueden permitir “que la próxima generación de chicas sepa lo que es sentir miedo y desamparo de la justicia ante algo tan sagrado como es la libertad sexual”.