El Museo del Greco tiene restringirá su horario de apertura a sólo dos horas, entre la 16.00 y las 18.00 horas, a partir de este miércoles 27 de septiembre. Es una medida temporal, que esperan revertir “cuanto antes”. El Museo del Greco y el Museo Sefardí, que en la actualidad comparten el personal de vigilancia de sala, han iniciado ya el trámite de separación de las plantillas, al igual que el procedimiento para incrementar la jornada de todos los contratos de tarde, con su ampliación salarial correspondiente.
Todo esto, junto a la dotación de la oferta de empleo público de 2018, que prevé aumentar, de manera exponencial, el número de efectivos el año próximo, garantizaría la prestación de los servicios del museo en su horario habitual. Estas tres medidas se han comunicado ya al comité de empresa y a los sindicatos y se implementarán con la mayor rapidez posible.
Sigue cobrando pese a tener seis de sus ocho galerías cerradas
Este espacio museístico continúa hasta la fecha cobrando una entrada de tres euros a los visitantes pese a que en la actualidad solo se pueden visitar dos de las ocho salas de las que dispone en plena judería toledana. En la actualidad solo se puede visitar la sala que alberga las 13 pinturas del pintor cretense que conforman ‘El Apostolado’, la capilla y los jardines.
El Museo del Greco oferta, de igual modo, del orden de tres exposiciones temporales al año, cuya posibilidad de visita también se ve mermada en un alto porcentaje, según trabajadores del centro consultados por esta agencia.
A esto se añade que los visitantes, de antemano, no saben si va a ser posible visitar esas muestras, puesto que no figura aviso alguno en los medios de difusión del museo sobre cuáles son las salas cerradas.
Este es el caso de la exposición temporal que hay en la actualidad, ‘A través del lienzo’, cuya exhibición estaba prevista entre el 29 de octubre y el 15 de diciembre, pero que desde la pasada semana permanece cerrada. A pesar de que el Ministerio decidiera en un principio, ante esta situación, no cobrar entrada, desde hace meses los visitantes tienen que pagar tres euros de manera habitual, cuando solo se puede acceder a dos de las estancias.
Un cartel en la taquilla en el que se informa de que “puede haber salas vacías” da cuenta de esta situación, aunque no informa ni de qué salas se trata ni de cuántas. En el caso de la página web del museo, también se comunica que puede haber espacios cerrados.
Esta tesitura, además de estar creando malestar entre el personal de este espacio museístico toledano, perjudica a las muchas personas que a diario recibe y que han programado una visita dentro de su estancia en Toledo, ya que incluso los visitantes están expresando su malestar en las hojas de reclamación facilitadas por el personal del centro.
Problemas de personal
La escasez de personal que arrastra este museo estatal podría estar detrás del cierre de salas. No en vano, en mayo de 2018 los trabajadores que lo atienden decidieron no acudir a trabajar para denunciar la falta de efectivos que sufre el centro. En consecuencia, el espacio museístico tuvo que cerrar al público.
Según informaron los sindicatos, en ese momento prácticamente toda la plantilla dependiente de Museos Estatales está adscrita al Museo Sefardí, en cuya Relación de Puestos de Trabajo figuran, además de la media docena de personas del ‘staff’ técnico y administrativo, todos los vigilantes de sala (unos 45), las tres taquilleras, los dos jefes de planta y los tres porteros mayores.
El Museo del Greco, sin embargo, sólo cuenta como personal propio con el director, un conservador, un restaurador, un técnico de difusión, un auxiliar administrativo y un jardinero, situación que provocaba que los vigilantes, jefes de sala, porteros mayores y taquilleras “no sepan nunca dónde tienen que ir a trabajar”.