Los sindicatos CCOO-Construcción y Servicios, UGT y USO han realizado un llamamiento conjunto por el que convocan a todos los trabajadores y trabajadoras de la empresa Marsegur a dos jornadas de huelga, los días 25 y 26 de septiembre, en todos los centros públicos o privados que esta empresa tiene en todo el territorio nacional, entre ellos los vigilantes de seguridad del Museo del Ejército del Alcázar de Toledo.
Tras la celebración de un acto de conciliación en el Servicio Interconfederal de Mediación y Arbitraje (SIMA), que ha terminado sin acuerdo al no aceptar la empresa Marsegur el requerimiento para cumplir con el convenio colectivo sectorial de los vigilantes, los tres sindicatos han decidido plantear esta huelga en todos los servicios que la empresa tiene en el país.
Estos paros vienen motivados por los “múltiples incumplimientos” en materia laboral con los trabajadores, los “reiterados retrasos” en el pago de nóminas, y en particular el incumplimiento en todas las obligaciones contractuales asumidas en el servicio de Defensa, “extremo que sus trabajadores están padeciendo especialmente, con problemas con la tenencia o ausencia del arma, uniformidad, relevos o servicios descubiertos”.
En Castilla-La Mancha, Marsegur tiene adjudicada por el Ministerio de Defensa la contrata del servicio de Seguridad del Museo del Ejército, donde emplea a unas 13 personas. CCOO-Construcción y Servicios ha instado reiteradamente al Ministerio Defensa a rescindir el contrato con esta empresa, que impone a sus trabajadores un convenio colectivo propio con salarios y derechos “muy por debajo” del convenio estatal del sector. Además, afirma que ese convenio ha sido anulado ya dos veces por la Audiencia Nacional a instancias del Ministerio de Trabajo. Marsegur recurrió la anulación ante el Supremo y mientras se resuelve el recurso, lo sigue aplicando.
Otros incumplimientos
El sindicato afirma que Marsegur tampoco tiene permiso del Ministerio de Interior para acceder al armero de la Seguridad del Alcázar y sus vigilantes prestan servicio desarmados, “incumpliendo así de forma flagrante el pliego de condiciones de la contrata”.
Además, la empresa está empleando como vigilantes del Museo del Ejército a varias personas que “ carecen de la habilitación correspondiente del Ministerio del Interior, incurriendo en intrusismo labora”, ya denunciado por CCOO ante la Delegación del Gobierno y ante el departamento de Seguridad Privada de la Policía Nacional.
Este nuevo conflicto en el Museo del Ejército de Toledo se suma al que mantuvieron los conserjes del edificio con Proman, otra adjudicataria del Ministerio de Defensa, que también incurrió en irregularidades y que provocó paros indefinidos. La empresa fue sustituida por otra, pero la situación laboral de muchos de ellos, debido a bajas forzadas, quedó en el limbo y sin soluciones.