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Estimado señor presidente:
Antes de nada, deseamos que tenga una acertada legislatura y que esta sea de provecho para toda la comunidad autónoma gobernando con honestidad, rectitud y justicia por ser el primer castellano-manchego y servir de ejemplo hasta el último ciudadano de la región.
Hemos acabado recientemente una campaña electoral y hemos comprobado con desasosiego que los problemas de la 'España Vaciada' no se han abordado con la seriedad que merecen. El toque de atención y grito desesperado que supuso la manifestación del 31M podemos asegurar que han caído en saco roto. Viene esta reflexión a colación de que no podemos obviar que usted también pertenece a un partido político y lo que estamos viendo por medio de las declaraciones que prensa, radio y televisión nos transmiten diariamente es el habitual juego de partidos, mayormente en beneficio y acomodo de los políticos que del bien general y el gobierno justo de los ciudadanos, estamos en el punto en el cual se olvidan ya las promesas electorales y comienza el habitual juego de las sillas y sillones.
No queremos que esto le ocurra a usted y por eso antes de que se lance a la vorágine de las promesas vacías de la campaña y después de cerradas las urnas torne a desilusionarnos, creemos conveniente hacerle algunas reflexiones y comunicarle algunas ideas de lo que creemos que esta tierra necesita.
La voz del 31M era de alerta. Una alerta sobre un negro futuro que es el que pinta en lontananza y sobre el que los partidos pasan de puntillas o con subterfugios evitándolo y esquivándolo.
El mundo rural adolece de servicios y los que tiene están distantes muchos kilómetros unos de otros para lo que es necesario el coche dado que la vertebración deficiente de nuestra comarca es por carretera únicamente y por tanto dependiente del petróleo.
Nuestra forma fundamental de vida es la agricultura y algo de ganadería (la que nos van dejando y en cualquier caso muy por debajo de la necesaria desde el punto de vista sostenible) que se viene explotando según el paradigma de la 'Revolución Verde', no porque no haya otros paradigmas más indicados o sostenibles sino porque es el que ustedes nos imponen. Estos métodos de cultivo son altamente dependientes de los hidrocarburos del petróleo, bien en forma deg asoil bien en forma de agroquímicos.
Podemos por tanto concluir que el petróleo es la sangre que mueve nuestra comarca y afecta de manera importante el devenir presente y futuro de nuestras vidas y rentas para permitirnos seguir viviendo de manera digna.
Por otra parte, desde ámbitos científicos y universitarios nos llegan avisos que no son nuevos pero que ya son inminentes sobre picos de precio y carestía del petróleo, sobre todo del gasoil. Sabemos que usted es conocedor de este problema pues los avisos no solamente vienen de ámbitos académicos y científicos sino de la propia Agencia Internacional de la Energía y usted es una persona preparada, formada e informada y se rodea de gente de la misma condición.
Aquí es donde le hacemos la Primera Reflexión:
Esta legislatura debe ser la de la Transición Energética Ordenada que nos merecemos todos, para ello las energías alternativas suponen una necesidad en el medio rural y por tanto en la Comarca por lo que deben estar libres de cualquier limitación normativa o fiscal para que la iniciativa privada cubra en un tiempo breve lo que la Administración, con una evidente dejación de funciones, ha obviado.
Los técnicos de la Junta lo que tienen que hacer es la tarea importante y no desdeñable de coordinación para que la inversión que se realice se vea maximizada en su aprovechamiento. Aquí el bien común debe prevalecer sobre los intereses de las compañías eléctricas en tanto estamos hablando de condiciones mínimas de vida para mantener población en el territorio y ser una necesidad básica.
Sobre la vertebración de la comarca, esta debe pivotar en medios de transporte comunitarios de personas y mercancías, eficientes y sostenibles, requisitos que únicamente cumple el tren. Necesitamos una planificación y ejecución urgente que solamente desde la Junta se puede llevar a cabo. Llegamos tarde y cada día que pase, sin realizar estas necesarias obras, aumentará la dificultad y encarecerá el coste final por la dependencia que su realización tiene del petróleo. Ahora, que aún tenemos precios del petróleo asequibles, es el momento, después será demasiado tarde dejando incomunicado e inútil una parte del territorio para la comunidad y el país, en cuanto a producción y distribución de recursos necesarios del sector primario.
(Seguiremos.)
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