Palabras Clave es el espacio de opinión, análisis y reflexión de eldiario.es Castilla-La Mancha, un punto de encuentro y participación colectiva.
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¡Qué importa el paro registrado!
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¡Que no, que no! ¡Que qué más da que en Castilla-La Mancha se hayan registrado 2.435 parados más en el mes de febrero o 1.949 menos en España! ¡Que no nos cuenten más cuentos, como diría León Felipe, que ya nos los sabemos todos! ¡Y que guarden silencio de una vez los plumillas y los voceros de ese amarillismo que nos desinforma y nos manipula desde la mayoría de los medios!
Aquí lo que verdaderamente importa es que este maldito neoliberalismo que el Partido Popular gestiona ufano en nuestro país arrastra un saldo de 4.812.486 parados registrados, de los que el gobierno de nuestra sin par María Dolores (de) Cospedal debe apechugar con los 260.156 de Castilla-La Mancha.
Lo que importa es que a este ritmo de creación de empleo, o de destrucción en nuestra región, necesitaremos décadas, ¡décadas!, para reducir el paro a los niveles de antes de la crisis.
Lo que importa es que, mientras tanto, muchos de esos parados, familias enteras incluso, se ven abocados a afrontar hoy el drama del desahucio, el drama del frío hasta en los tuétanos y del hambre hasta el dolor de tripas, o el de la desatención absoluta de sus hijos o de sus dependientes; y mañana, el drama de la improbabilidad de unas pensiones dignas, o el de la depresión y el de redimirse de una vez por todas con un salto desde «el viaducto», como proponía Max Estrella, o desde el Alcázar de Toledo, o desde las Casas Colgadas de Cuenca. Y si no lo aceptan con resignación cristiana, si se atreven a protestar ante los parlamentos o ante los bancos, o si acaso se resisten cuando lleguen los del juzgado a echarlos de sus viviendas, ¡palo y tente tieso, que la propiedad es sagrada, especialmente la de los bancos, y para eso está la poli!
Así que ¡qué demonios nos cuentan con esto de que mejoran las cifras del paro, de que hay brotes verdes, de que salimos del túnel! No queremos ni brotes verdes ni túneles. Lo que queremos es que los artículos 35 (derecho al trabajo), 43 (derecho a la salud) o 47 (derecho a la vivienda) de la Constitución, entre otros muchos, se cumplan de una puñetera vez, que llevamos, ¡ojo al dato, jóvenes lectores, si es que aún andáis ahí y no os habéis largado a otro país en busca de trabajo!, 36 años, treinta y seis, sí, en cifras y letras, de Constitución incumplida, casi tantos como gobernó Franco.
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¡Queno, que no! ¡Que qué más da que en Castilla-La Mancha se hayan registrado 2.435parados más en el mes de febrero o 1.949 menos en España! ¡Que no nos cuentenmás cuentos, como diría León Felipe, que ya nos los sabemos todos! ¡Y queguarden silencio de una vez los plumillas y los voceros de ese amarillismo quenos desinforma y nos manipula desde la mayoría de los medios!
Aquílo que verdaderamente importa es que este maldito neoliberalismo que el PartidoPopular gestiona ufano en nuestro país arrastra un saldo de 4.812.486 paradosregistrados, de los que el gobierno de nuestra sin par María Dolores (de)Cospedal debe apechugar con los 260.156 de Castilla-La Mancha.
Loque importa es que a este ritmo de creación de empleo, o de destrucción ennuestra región, necesitaremos décadas, ¡décadas!, para reducir el paro a losniveles de antes de la crisis.
Loque importa es que, mientras tanto, muchos de esos parados, familias enterasincluso, se ven abocados a afrontar hoy el drama del desahucio, el drama delfrío hasta en los tuétanos y del hambre hasta el dolor de tripas, o el de ladesatención absoluta de sus hijos o de sus dependientes; y mañana, el drama de laimprobabilidad de unas pensiones dignas, o el de la depresión y el de redimirsede una vez por todas con un salto desde «el viaducto», como proponía MaxEstrella, o desde el Alcázar de Toledo, o desde las Casas Colgadas de Cuenca. Ysi no lo aceptan con resignación cristiana, si se atreven a protestar ante losparlamentos o ante los bancos, o si acaso se resisten cuando lleguen los deljuzgado a echarlos de sus viviendas, ¡palo y tente tieso, que la propiedad essagrada, especialmente la de los bancos, y para eso está la poli!
Asíque ¡qué demonios nos cuentan con esto de que mejoran las cifras del paro, deque hay brotes verdes, de que salimos del túnel! No queremos ni brotes verdesni túneles. Lo que queremos es que los artículos 35 (derecho al trabajo), 43(derecho a la salud) o 47 (derecho a la vivienda) de la Constitución, entreotros muchos, se cumplan de una puñetera vez, que llevamos, ¡ojo al dato,jóvenes lectores, si es que aún andáis ahí y no os habéis largado a otro paísen busca de trabajo!, 36 años, treinta y seis, sí, en cifras y letras, deConstitución incumplida, casi tantos como gobernó Franco.
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¡Queno, que no! ¡Que qué más da que en Castilla-La Mancha se hayan registrado 2.435parados más en el mes de febrero o 1.949 menos en España! ¡Que no nos cuentenmás cuentos, como diría León Felipe, que ya nos los sabemos todos! ¡Y queguarden silencio de una vez los plumillas y los voceros de ese amarillismo quenos desinforma y nos manipula desde la mayoría de los medios!
Aquílo que verdaderamente importa es que este maldito neoliberalismo que el PartidoPopular gestiona ufano en nuestro país arrastra un saldo de 4.812.486 paradosregistrados, de los que el gobierno de nuestra sin par María Dolores (de)Cospedal debe apechugar con los 260.156 de Castilla-La Mancha.
Loque importa es que a este ritmo de creación de empleo, o de destrucción ennuestra región, necesitaremos décadas, ¡décadas!, para reducir el paro a losniveles de antes de la crisis.
Loque importa es que, mientras tanto, muchos de esos parados, familias enterasincluso, se ven abocados a afrontar hoy el drama del desahucio, el drama delfrío hasta en los tuétanos y del hambre hasta el dolor de tripas, o el de ladesatención absoluta de sus hijos o de sus dependientes; y mañana, el drama de laimprobabilidad de unas pensiones dignas, o el de la depresión y el de redimirsede una vez por todas con un salto desde «el viaducto», como proponía MaxEstrella, o desde el Alcázar de Toledo, o desde las Casas Colgadas de Cuenca. Ysi no lo aceptan con resignación cristiana, si se atreven a protestar ante losparlamentos o ante los bancos, o si acaso se resisten cuando lleguen los deljuzgado a echarlos de sus viviendas, ¡palo y tente tieso, que la propiedad essagrada, especialmente la de los bancos, y para eso está la poli!
Asíque ¡qué demonios nos cuentan con esto de que mejoran las cifras del paro, deque hay brotes verdes, de que salimos del túnel! No queremos ni brotes verdesni túneles. Lo que queremos es que los artículos 35 (derecho al trabajo), 43(derecho a la salud) o 47 (derecho a la vivienda) de la Constitución, entreotros muchos, se cumplan de una puñetera vez, que llevamos, ¡ojo al dato,jóvenes lectores, si es que aún andáis ahí y no os habéis largado a otro paísen busca de trabajo!, 36 años, treinta y seis, sí, en cifras y letras, deConstitución incumplida, casi tantos como gobernó Franco.
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