- El ‘miniparador’ comenzó a ejecutarse en 2015, cuenta con un presupuesto de 20 millones de euros y 22 habitaciones, después de que el proyecto se recortara en una cuarta parte durante la época de Cospedal
El proyecto para la construcción del Parador de Turismo de Molina de Aragón, situado en la provincia de Guadalajara, en la comarca de Molina-Alto Tajo, avanza para convertirse en una realidad, después de varios años de retraso en su ejecución. El Gobierno anunciado una nueva licitación para adjudicar la dirección y la coordinación de seguridad y salud de la obra por valor de 268.804,97 euros y una duración de 28 meses. Se trata de un trámite habitual en las obras complejas y extensas que promueve el Instituto de Turismo de España (Turespaña) en las que se externalizan determinados servicios como el desarrollo de algunas instalaciones específicas o porque se requiera de mayor personal a pie de obra.
Según publica el BOE, el plazo para la presentación de solicitudes está abierto hasta el 8 de enero. La apertura de ofertas se producirá previsiblemente el 23 de enero en la Sede del Instituto de Turismo de España, en Madrid.
La edificación del Parador de Molina de Aragón ha estado rodeada de polémica y continuos retrasos en su ejecución. Desde que el Gobierno del PSOE lo presentara por vez primera en 2010 dentro de una serie de inversiones que el gabinete de Zapatero planteó para compensar a la comarca molinesa por los daños económicos y medioambientales que originó el incendio del Ducado de Medinaceli de 2005 en el que perecieron 11 voluntarios de un retén, el futuro alojamiento ha pasado por dos proyectos de obra, una falta de presupuesto real, promesas políticas incumplidas y dilaciones en el inicio de los trabajos.
El proyecto original fue dado a conocer en septiembre del 2011, en el contexto previo de las elecciones generales, cuando el secretario de Estado de Turismo Joan Mesquida y José María Barreda colocaron la primera piedra en un acto simbólico en la capital del Señorío de Molina. El plan del entonces presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, contemplaba un parador de 80 habitaciones y otros servicios comunes como aparcamiento cubierto, spa y piscinas climatizadas. El edificio ocuparía una superficie de 21.000 metros cuadrados en el conocido como paraje de las Piedras de Santa Librada y su presupuesto se cerró en 29 millones de euros.
Después, la llegada del PP al Gobierno supuso el fin de este modelo de parador, que hubiera resuelto el déficit de plazas hoteleras de Molina de Aragón y habría actuado como motor de atracción de turistas al Parque Natural del Alto Tajo. En los años siguientes, el parador vivió otro receso. Turespaña decidió paralizar todas las obras de expansión de la red hotelera previstas entre las que se encontraba el Parador de Molina de Aragón, a consecuencia de la crisis económica que azotaba el país. Así que no fue hasta marzo de 2015, dos meses antes de celebrarse las elecciones autonómicas el momento en que el proyecto de este establecimiento turístico se reactivaba.
Durante una visita del ministro de Industria, José Manuel Soria y la presidenta castellano-manchega, Dolores De Cospedal a la localidad molinesa, se presentó el proyecto definitivo. Un parador, rebautizado por los vecinos de Molina como el ‘miniparador’, que incluía 22 habitaciones, se quedaba sin el aparcamiento cubierto que se sustituía por otro pequeño en superficie y eliminaba el complejo de Spa y las piscinas. En definitiva, un edificio con una superficie de 7.000 metros cuadrados y un presupuesto de algo más de 20 millones de euros que significaba la cuarta parte del primigenio de 2009. Este medio se ha puesto en contacto con Turespaña para conocer las razones por las que el presupuesto no se ha reducido de forma proporcional a las instalaciones, pero desde el organismo nacional de turismo han declinado hacer cualquier tipo de declaración.
Las obras de construcción comenzaron en 2015 y está programado que concluyan a finales de 2019. Según fuentes de la empresa pública Tragsa, los trabajos se desarrollan a un ritmo normal, sin mayores contratiempos y ya se han completado 3.000 de los 7.000 metros cuadrados totales durante un periodo de dos años. A lo largo de 2017, los trabajos se han centrado en excavaciones del terreno, la cimentación y la estructura del edificio, que se han llevado a cabo con un presupuesto de 2.500.001 euros, según datos aportados desde el Ministerio de Industria a eldiarioclm.es
Durante los años 2018 y 2019 se desarrollarán la cubierta y las instalaciones interiores del inmueble tales como habitaciones, áreas comunes, calefacción o aire acondicionados. Además se realizará el equipamiento y decoración del alojamiento hotelero que corresponden a la sociedad Paradores de Turismo de España S.M.E., S.A., una vez que el promotor, Turespaña le entregue el edificio.