Está en su “mejor momento como mujer y como cantante”. Así resume Luz Casal, en una entrevista con eldiarioclm.es, el proceso vital en el que se encuentra, dentro de la gira de su nuevo disco 'Que corra el aire', un trabajo de “amor, vida, homenajes y verdades” producido por Ricky Falkner, con el que recorre toda España y que recala en Toledo el próximo día 14 de agosto. También pasará por Ciudad Real el 17 de agosto y por Albacete el 15 de septiembre.
Con esta gira espera seguir cumpliendo su objetivo de comunicar con la gente y de expresar su máxima del “aquí y ahora”. La cantante gallega, la voz más carismática y conmovedora de las últimas décadas, es una de las artistas españolas más reconocidas en todo el mundo pero le gusta la discreción, la tranquilidad y no quiere banderas ni clichés sobre su música ni sobre su vida. “Aprendo a vivir con cada estación”, reza una de las canciones de su último álbum, y así nos abre las puertas de esa experiencia.
'Que corra el aire' es el primer álbum, de toda tu carrera, grabado y mezclado íntegramente en España. ¿Por qué ahora?
La verdad es que hay muchas cosas que no puedo razonar y esta es una de ellas (risas). Tuve ese pálpito. Me cuesta un mundo explicar por qué sé que tengo que hacer algunas cosas. Simplemente lo sé. En eso soy muy perseverante, es como una iluminación, un saber que tengo que hacerlo así. He grabado toda mi vida fuera, pero no por ninguna razón especial, simplemente ahora era una forma de buscar que todo el equipo tuviera una relación casi íntima, y para eso convivir resultaba de lo más interesante. En esta ocasión no me apetecía irme fuera. Era casi una necesidad.
También ha sido grabado prácticamente en directo…
Sí, casi en su totalidad. Todas las canciones estaban muy desarrolladas, y queríamos sacar lo mejor de cada uno sin muchas intervenciones, salvo algunos arreglos posteriores y pequeños detalles que han hecho que luzca mejor.
Son las primeras canciones originales que publicas desde 2013. ¿También ha formado parte de una necesidad, de ese pálpito que mencionabas?
Puedo tener muchas certezas pero en este trabajo al que me dedico hay muchas dudas. Un día tienes un flash estupendo, te sientes en lo más alto, pero después tienes unos bajonazos de esos en los que te estampas con cualquier obstáculo por pequeño que sea. Yo siempre estoy con pequeñas notas y melodías, pero no todo vale. Lo que me lleva tiempo es rematar esas ideas, letras y melodías. Quiero estar segura de que no me repito, de lo que quiero comunicar y compartir. Probablemente mi lentitud no venga tanto por falta de ideas como por asentar esas ideas.
Hay canciones de amor, otras de refugio y de casa, las que apelan al ‘carpe diem’, y también homenajes. ¿Es un diario de vivencias?
Así es. Generalmente, siempre he tenido la sensación, con cada disco, de que estoy reflejando aquello que me ha conmocionado, que me produce rabia o satisfacción. Por eso hay esa variedad, aparte de que yo como intérprete tenga como seña la necesidad de experimentar. Escucho mucha música y muy variada, a veces incluso recabo más información de la que mis sentidos son capaces de asimilar (risas). Hay fogonazos y letras que son ese momento, que deben hacerse en ese mismo momento. No vivo esa misma situación pasados los años o no de la misma manera.
¿Buscas sorprenderte, retarte?
Siempre. Busco hacer algo que no haya hecho o mejorar algo que ya hice. Y si con ello no me reto, no le veo el sentido. Se me hace imprescindible. Volver a hacer lo mismo sería una traición enorme a mí misma.
Un amigo me comentó una vez que escucharte cantar era como escucharte vivir…
¿Puede ser de otra manera? Si no lo vivo, aunque sea a nivel interpretativo, no le encuentro razones. Grabo canciones que me representan. Todas ellas. No hay una que me represente por sí sola, por lo tanto sí que es mi vida. Mi manera de interpretar es variada porque la vida no es una sola cosa. Por ejemplo, me puede gustar vestir de negro, pero de repente me pongo de verde-manzana a saber por qué. En la música, aunque es un ejemplo muy simple, me pasa lo mismo.
En este disco vuelves a hablar del ruido entendido como molestia, como el elemento que tapa lo importante ¿Ha crecido el componente social de tu música?
Siempre lo ha habido y supongo que es algo inherente. Hay demasiada contaminación acústica que hace que no vivas tu vida. Me da mucha tristeza cuando percibo, cuando sé, cuando me cuentan y veo que alguien vive su vida a través de otros. Eso me conmociona y pienso que qué manera de perder al tiempo. Por eso hago tantas alusiones al tiempo e incido en que estamos aquí de paso; hay que evitar el ruido que te distrae y ser consciente de que el tiempo es finito y es lo más valioso que tienes. De tanto sentirlo, me apetece comunicarlo a la gente.
El ruido es también la saturación de información, las redes sociales, las nuevas tecnologías… ¿Cómo has ido abordando todos estos cambios en tu carrera?
Los cambios puedes analizarlos y vivirlos y combinar esa fórmula. Nunca me ha gustado estar fuera de la actualidad. Yo cantaba y trabajaba cuando todavía no se usaban ordenadores y hacer un sonido pregrabado era atentar contra la esencia del rock más puro. Pero ahora lo que las nuevas tecnologías ofrecen debe usarse. A lo mejor no lo tengo en vena porque no he crecido con ello, pero no es algo que rechace. En la música prácticamente no rechazo ninguna posibilidad, porque de una manera u otra te puede servir.
En cuanto al estilo, he leído sobre tu disco muchas etiquetas: que es “rock de antes” o “rock de siempre”. ¿Qué tal si lo llamáramos “rock femenino”?
Desde luego esa me gusta más. El rock femenino tiene unas peculiaridades que no se pueden negar. Si te fijas en toda la historia del rock con mujeres, es así. Y yo hago eso. A lo mejor si estilísticamente fuera mucho más sencilla, no tendría que dar explicaciones como lo he hecho toda mi vida, defendiéndome de que alguien decida si soy esto o lo otro. Mi voz, mi sensibilidad, mi conocimiento, hacen que cante y que sea de esta manera. Por eso solo me peleo cuando veo que tengo enfrente a un idiota, que decide que esto es así y no hay más. Cuando pasa eso, te apetece sacar una lista de ejemplos que son exactamente iguales a lo que tú haces. Cuando yo empecé a hacer discos con canciones tan distintas, el 'leitmotiv' de todas las entrevistas era que cómo una rockera podía cantar una canción de amor. ¡Pero si los grandes nombres de la música rock han cantado las baladas, en algunos casos, más cursis que los cantantes más románticos!
Vamos, que has tenido que defenderte por ser quien eres
Sí, cuando todo es más sencillo… Yo lo único que quiero es mi pequeño espacio para expresarme y comunicarme. Lo que hago es lo que quiero hacer. Canto a mi manera e intento hacerlo de la forma más honesta posible. Esto parece muy arrogante, pero no hay ni un solo tema que haya grabado en todos mis discos que pueda decir que qué mierda de canción.
Está claro que, al margen de etiquetas, las mujeres necesitamos referentes también culturales para el empoderamiento y tú lo eres en ese sentido, aunque sea un cliché que no hayas buscado…
Claro, eso es así. Yo no me considero una mujer modosa, pero todo lo que yo haya podido hacer que haya servido a otras mujeres, me ha servido también a mí. Sin algarabías, con normalidad. Para mí un ejemplo grandísimo, en mi vida como mujer, ha sido mi madre. Fue una mujer que trabajó siempre, con una relación sentimental compleja, y todo con convencimiento. Su ejemplo me ha marcado. Es como cuando pasé los dos cánceres, actué como tenía que actuar, y no le doy mayor mérito. Me da satisfacción que la experiencia haya servido para que algunas mujeres se sintieran más fuertes. Pero con tranquilidad, no quiero ir de abanderada de nada.
Tu carrera ha sido reconocida en todo el mundo, más allá de Francia, que es el país que te ha acogido siempre casi como primera dama de la canción, pero seguro sabes que en España se te quiere
Soy más que consciente. Nunca ha tenido ninguna sensación diferente. Nunca se me ha dado la espalda. Pero es cierto que con Francia mantengo una relación desde el año 1991 y siempre he hecho conciertos independientemente de si he sacado disco o no. De cualquier forma, la gira es por y para el público y yo estoy cómoda en todas partes. ¡Tengo energía para todos!
Todas las fechas de los conciertos de la nueva gira de Luz Casal pueden encontrarse en este enlace, donde también aparecen los puntos de venta oficiales para las entradas.en este enlace