La polémica de la construcción de viviendas en la Vega Baja de Toledo llega a Europa

La Comisión de Peticiones del Parlamento Europeo preguntará al Ayuntamiento de Toledo si ha informado a la Unesco sobre el proyecto urbanístico para construir viviendas en la Vega Baja del río Tajo, lo que podría poner en peligro una zona de interés cultural y arqueológico.

De esta forma, la presidenta de Peticiones, la 'popular' Dolors Montserrat, ha decidido mantener abierta la petición de una plataforma ciudadana que pidió amparo a las instituciones sobre el deterioro de la zona arqueológica y de protección de paisaje de Toledo en el espacio de la Vega Baja.

“Nos estamos jugando un paisaje europeo de valor universal, la esencia de Europa está ahí”, ha defendido en la Eurocámara Antonio Zárate, representante de la asociación 'Toledo: Sociedad, Patrimonio y Cultura', que ha insistido en que las instituciones europeas son la “última opción” para parar el proyecto.

Montserrat ha resuelto reclamar información a Toledo sobre todos los aspectos del proyecto y saber si ha transmitido sus planes a la Unesco, pese a la opinión en contra de la Comisión Europea, que ha apuntado que no tiene indicios de que se haya violentado ninguna normativa ambiental o de preservación de patrimonio.

El PSOE culpa al exalcalde 'popular' Agustín Conde

Durante el debate, el 'popular' José Manuel García Margallo ha lamentado que Bruselas haga una “dejación” ante un tema de interés europeo y ha pedido protección para el lugar de interés cultural y con “especial importancia” para la identidad europea.

Por parte del PSOE, la eurodiputada Cristina Maestre ha achacado el plan urbanístico al exalcalde 'popular' Agustín Conde y ha defendido que hay un convenio para preservar la zona. “No existe caso”, ha zanjado.

El parlamentario de IU, Manu Pineda, se ha interesado por el asunto y ha pedido investigar las implicaciones del proyecto, mientras que del lado de Vox, Hermann Tertsch ha asegurado que hay “motivos” para estudiar el caso y ha afeado que el Ejecutivo europeo no se haya interesado por la petición, en contraste con las “injerencias masivas que suele hacer” en otros asuntos.

En su intervención final, Montserrat ha lamentado que Bruselas “no tome en interés” las peticiones que se presentan y “despache” los temas que presentan los ciudadanos. Así, ha reclamado que se involucre más, recordando que este comité es el “puente de contacto” que tienen las instituciones con los ciudadanos.