El concejal de Educación de Vox en Toledo equipara la eutanasia con un suicidio
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“La eutanasia también es suicidio”. Son palabras de Daniel Morcillo, concejal de Vox en el Ayuntamiento de Toledo y responsable de la Concejalía de Educación en el gobierno municipal mixto junto al PP. Este viernes se debatía una moción de IU-Podemos que proponía crear una Mesa de la Salud Mental y el edil de la formación ultra se ha descolgado con esta afirmación.
Lo hacía durante el turno de réplica después de que el portavoz de IU-Podemos, Txema Fernández, expusiera los motivos de su propuesta, que tenía como objetivo impulsar acciones encaminadas a la prevención y promoción del bienestar y la salud emocional, social y mental.
Las palabras de Morcillo llegaban casi al final de su intervención, que cuenta con un tiempo máximo de cinco minutos, y generaban las críticas (fuera de micrófono) de la bancada en la que se sitúa la oposición (PSOE e IU-Podemos). El alcalde, Carlos Velázquez, ha intervenido para pedir que dejaran finalizar su discurso al edil de Vox, con el que argumentaba su voto contrario a la moción.
La propuesta de IU-Podemos no ha salido adelante tras ser rechazada por PP y Vox aunque sí ha contado con el apoyo del PSOE. La concejala socialista Ana Abellán ha sido la primera en replicar las palabras del concejal de Vox afirmando que “la eutanasia es un derecho adquirido por ley, en el que una persona quiere morir dignamente y dejar de ver sufrir a los que le rodean”.
“No compare suicidio con eutanasia. Antes de decir esas barbaridades estudien un poquito”, ha aseverado Abellán, que ha recordado que hablar de salud mental es hacerlo del “bienestar integral de personas” que “siguen padeciendo algún tipo de estigma”, lo que supone “uno de los mayores obstáculos para su recuperación”.
Posteriormente, el portavoz de IU-Podemos, Txema Fernández, que había agotado su tiempo exponiendo los motivos de su propuesta, ha replicado también en el debate de otra moción las palabras de Morcillo. “Es un absoluto despropósito mezclar eutanasia y suicidio”, ha señalado para añadir que en esta legislatura no va a votar propuestas “a favor de partidos que dicen que si lo pones en árabe se cobra antes o que criminalizan a jóvenes”.
El juego de la confusión de Vox
El concejal del partido de extrema derecha mezclaba así dos conceptos que poco tienen que ver, jugando a la confusión y aprovechando la figura del suicidio asistido. Según explica la Asociación Derecho a Morir Dignamente, “la diferencia entre la eutanasia y el suicidio asistido es, básicamente, quién administra el fármaco”. En el caso de la eutanasia lo hace el personal sanitario. En cuanto al suicidio asistido es la persona la que se autoadministra el medicamento. En ambos casos bajo supervisión médica.
España cuenta con una ley que regula la eutanasia desde el año 2021, en la que se detalla que es “una práctica legalmente aceptable, siempre que sean observados concretos requisitos y garantías”.
La norma permitió incluir en el ordenamiento jurídico español un nuevo derecho individual. Es un proceso que conlleva una petición informada, expresa y reiterada en el tiempo por la persona y que, dice la ley, “se lleva a cabo en un contexto de sufrimiento debido a una enfermedad o padecimiento incurable que la persona experimenta como inaceptable y que no ha podido ser mitigado por otros medios”.
Esta ley deja en manos del paciente decidir si se hace con una administración directa de los fármacos por parte del sanitario, o si se lo administrará a sí mismo. Las comunidades autónomas deciden en cada caso qué fármacos administrar, aunque la guía del Ministerio de Sanidad al respecto incorporó recomendaciones sobre los medicamentos “para que la prestación se realice de forma homogénea en todo el Sistema Nacional de Salud”.
Vox ya intentó tumbar la ley vía Tribunal Constitucional. No lo consiguió. Rechazó su recurso de y avaló la ley por mayoría del pleno del tribunal de garantías porque, según explicó: “Garantiza el derecho a la autodeterminación de la persona sin dejar desprotegida la vida”.
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