“La valoración que hacemos es de decepción ante las expectativas creadas: el Estado no satisfará a corto plazo el nuevo modelo de financiación autonómica”.
El consejero de Hacienda, Administraciones Públicas y Transformación Digital de Castilla-La Mancha, Juan Alfonso Ruiz Molina, se mostraba contundente un día después de la reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera entre el Gobierno de España y las comunidades autónomas. “Estamos cansados de que solo se hable de privilegios para una comunidad y no de las necesidades del resto de España para hacer efectivo el principio de igualdad de oportunidades”.
El Ejecutivo de Emiliano García-Page dice “ser consciente de que a espaldas del Consejo de Política Fiscal y Financiera se siguen tomando decisiones por y para Catalunya que nos afectarán al resto”.
La decepción también tiene que ver, decía, con que, a sabiendas de que hay “comunidades infrafinanciadas como Andalucía, Murcia, Comunidad Valenciana y Castilla-La Mancha, no parece que se esté por [la labor] de un fondo transitorio de compensación”.
El responsable de la Hacienda castellanomanchega ha trasladado hoy en rueda de prensa que la “preocupación” en el seno del Ejecutivo de Castilla-La Mancha se ha visto incrementada a cuenta de la “financiación singular” que reclama la Generalitat de Catalunya. “Le pregunté a la ministra si hay una conversación bilateral entre el Gobierno de España y los independentistas y me dijo que no: que la discusión se está produciendo entre ERC y el Partido Socialista catalán. Eso nos ha generado más preocupación porque hay dos partidos de ámbito regional que están negociando aspectos que afectan al resto de los territorios”, lamentaba.
Hay “comunidades infrafinanciadas como Andalucía, Murcia, Comunidad Valenciana y Castilla-La Mancha, no parece que se esté por un fondo transitorio de compensación
El Gobierno de Castilla-La Mancha dice haber confirmado sus sospechas: “Alguien quiere tomar decisiones que afectan a Castilla-La Mancha” y se refiere al “reparto del dinero”.
Ruiz Molina asegura que llegó a la reunión con buenas sensaciones que al final no se cumplieron. “Pensábamos que el Gobierno de España iba a traer una declaración de principios sobre el nuevo modelo de financiación. Eso no se produjo. La vicepresidenta puso de manifiesto las dificultades del acuerdo por las diferencias que tenemos entre los territorios”.
En este sentido, el consejero ha comentado que Castilla-La Mancha ha instado al Ministerio de Hacienda a presentar al menos una propuesta inicial basada en los informes técnicos y la documentación que ya fue facilitada por las comunidades autónomas para que pueda ser discutida en el Consejo de Política Fiscal y Financiera “independientemente de que se apruebe después en las Cortes Generales”. En su opinión, es algo que tiene que “liderar” el Gobierno de España. “Nos sentimos decepcionados”, ha insistido en varias ocasiones.
La financiación singular para Catalunya: “Un chantaje”
Sobre la financiación singular que reclama la Generalitat catalana, Ruiz Molina ha vuelto a repetir que “es un chantaje para la gobernabilidad de Catalunya y de España. Es una propuesta egoísta. Espero que no se apropien de la llave de la caja común de todos los españoles”, comentaba porque eso, dice, “trocearía la riqueza del país en beneficio de unos pocos”. Desde su punto de vista se está “impidiendo el cometido constitucional del Estado de repartir la riqueza de manera más equitativa y justa”.
Se ha mostrado en desacuerdo con la propuesta catalana porque “considera que quien tiene más capacidad económica tiene más derechos. Eso va en contra de la Constitución”, advertía, para expresar también sus suspicacias sobre si eso también se aplicaría a los ayuntamientos catalanes.
Si Catalunya pretende recaudar el IVA que es un impuesto multifásico y que paga todo el territorio nacional, tendría problemas técnicos en su aplicación
“Nos preocupa enormemente lo que se está publicando en los medios sobre la Agencia Tributaria catalana o el consorcio o como se quiera denominar. Estaríamos en la antesala de un cupo catalán en diferido”, aseguraba el consejero castellanomanchego.
En este aspecto, ha reconocido que no se plantean, de momento, recurrir esta decisión porque antes “habrá que ver en qué términos se diseña para tomar medidas” y en todo caso advertía: “Si Catalunya pretende recaudar el IVA que es un impuesto multifásico y que paga todo el territorio nacional, tendría problemas técnicos en su aplicación”.
No queremos poder tener más déficit sino más ingresos y el actual modelo nos merma los ingresos
“Ayer en mis intervenciones hablé de justicia para Castilla-La Mancha. Que se reconozca que es una de las regiones infrafinanciadas como reconocen los servicios de estudios económicos independientes”.
Castilla-La Mancha no quiere que se amplíe el margen del objetivo de déficit. “No queremos poder tener más déficit sino más ingresos y el actual modelo nos merma los ingresos”. Mientras se aprueba el nuevo modelo, el Gobierno de Castilla-La Mancha ha pedido “un fondo transitorio para compensar a las comunidades autónomas infrafinanciadas que son Andalucía, Murcia, Comunitat Valenciana y Castilla-La Mancha”.
También reclamó ayer “hacer efectiva cuando antes la condonación de la deuda, que en su mayor parte es consecuencia de la infrafinanciación. Nosotros no usamos ese término, lo definimos como reestructuración de deuda”, matizaba.
La respuesta de la ministra María Jesús Montero tampoco gustó. “Nos reunirá en julio y septiembre para hablar de metodología y le tuve que decir que eso tendría ya que estar aprobado porque ya se ha dado el visto bueno para condonar 15.000 millones de euros a Catalunya”.
El consejero ha vuelto hoy a pedir a los partidos políticos de Castilla-La Mancha la defensa de “una posición común” para lograr “la financiación suficiente para nuestra comunidad autónoma”.