Este 31 de mayo, Día de Castilla-La Mancha, hará poco más de un año de la victoria in extremis de Emiliano García-Page en las últimas elecciones autonómicas. Fue una noche electoral de infarto en la que no se confirmó su segunda mayoría absoluta consecutiva (y su tercer mandato, el primero fue con Podemos) hasta los últimos momentos.
¿Cómo ha transcurrido este año de legislatura? Page ha sido más comentarista que nunca de la política estatal, al tiempo que Castilla-La Mancha ha vivido un perfil legislativo bajo, por un lado, y altos niveles de debate político nacional, por otro. Los debates estatales sobre la amnistía, la financiación autonómica y la tauromaquia han contribuido a todo ello, en paralelo a las consecutivas citas electorales en Euskadi y Catalunya.
El presidente castellanomanchego obtuvo hace un año el mayor porcentaje de votos para el PSOE de toda España con el 45%, siendo el segundo mejor resultado para un candidato regional después del obtenido por el Partido Popular en la Comunidad de Madrid.
Con ello, Castilla-La Mancha se quedó como una suerte de isla, junto al Principado de Asturias y a Navarra, en cuanto a las autonomías gobernadas por el PSOE. Y con ello también se ensanchó el papel de Page, el único presidente socialista con mayoría absoluta, como azote 'extra' del Gobierno de Pedro Sánchez. Un rol que había compartido en el pasado con el aragonés Javier Lambán o el extremeño Guillermo Fernández Vara.
Tras el 28M se quedó en solitario con unas críticas que ya venían de mucho tiempo atrás. En realidad, el presidente castellanomanchego no ha dejado de ejercer ese rol desde el cisma socialista de 2016, pero el escenario que dibujaron las elecciones generales del 23J se lo pusieron aún más fácil: la legislatura quedaba en manos de ERC y Junts, y por tanto, de la aprobación de una ley de amnistía para los miembros del 'procés', entre otras cuestiones.
Mucha amnistía, pocas leyes
Page no ha dejado pasar ni una sola oportunidad desde el pasado verano para arremeter contra esta medida, primero como posibilidad y ahora ya como un hecho. Es más, se da la circunstancia de que este Día de Castilla-La Mancha se celebra solo unas horas después del debate en el Congreso de la ley de amnistía, un paso fundamental para la legislatura de Pedro Sánchez.
Durante todo este tiempo, el 'barón' socialista ha sido noticia nacional una y otra vez. Ha arremetido contra cada una de las negociaciones y diferentes pasos que se han dado para la aprobación de esta ley. El punto álgido llegó cuando dijo que la medida para que se incluyeran en la amnistía los delitos de terrorismo que no vulneraran los derechos humanos estaba “en el extrarradio de la Constitución”. El PSOE federal llegó incluso a mostrarle veladamente la puerta de salida.
Después llegaron las elecciones vascas, luego las catalanas y ahí ha seguido el presidente castellanomanchego valorando cada minuto y resultado. Por un lado celebrando el triunfo de Salvador Illa en Catalunya, pero al mismo tiempo dejando clara de nuevo su posición contraria a las negociaciones con los partidos independentistas de esta comunidad autónoma.
Mientras tanto, la política en Castilla-La Mancha se ha hecho más en el Consejo de Gobierno, el órgano ejecutivo, que en las Cortes regionales, a nivel legislativo. El Ejecutivo ha aprobado decenas de decretos y medidas pero únicamente han recibido luz verde en el Parlamento dos grandes leyes: la de los Presupuestos Generales de la región para el presente año y la conocida como 'Ley de Acompañamiento' de las cuentas públicas, que además salió adelante con polémica debido que supuso el cambio de golpe de una quincena de normas autonómicas, por la puerta trasera, denunció el PP.
Las Cortes castellanomanchegas, eso sí, han iniciado los trabajos de búsqueda de consenso para la futura reforma del Estatuto de Autonomía y también han mantenido una gran actividad en seno de las comisiones parlamentarias. Aunque eso para la ciudadanía suele pasar mucho más desapercibido.
Al margen de ello, la mayoría de los plenos se han centrado en debates generales que concluyen en propuestas de resolución muchas veces sin ejecución práctica. Curiosamente, en Parlamento castellanomanchego aprobó el pasado otoño, únicamente con la mayoría absoluta del PSOE, que no se debatieran temas que excedieran las competencias de la región (como pudiera ser la amnistía). Pero, mientras, Page continúa valorando los asuntos estatales en sus comparecencias públicas. Algunos afectan a Castilla-La Mancha y otros no. No hay sesión de control directa al presidente regional. Para eso habrá que esperar a la convocatoria de un nuevo debate sobre el estado de la región. Sin fecha, aunque suele celebrarse en otoño
El presidente autonómico sigue desplegando una amplia agenda de actos y en todos ellos se refiere a medidas y anuncios de carácter regional, al igual que hacen sus consejeros y consejeras. Es decir, no falta política ni iniciativa autonómica. Pero muchas de estas medidas quedan ensombrecidas o difuminadas por sus críticas al Gobierno, que no solo se han centrado en la amnistía.
Financiación y tauromaquia
García-Page también ha abierto otros frentes con Pedro Sánchez, entre ellos el de la financiación autonómica: a principios de abril le remitió una carta reclamándole que en la próxima Conferencia de Presidentes firme “un compromiso de Estado” con el objetivo de compensar los gastos que las medidas del Gobierno de España tienen para las finanzas de las comunidades autónomas. Por el momento, no ha recibido respuesta.
Y más recientemente ha protagonizado una sonada polémica a cuenta de la supresión del Premio Nacional de Tauromaquia, decretada por el ministro de Cultura, Ernest Ustasun, de Sumar. Page rechazó de lleno esta decisión y ya se ha sentado a negociar con la Fundación Toro de Lidia la puesta en marcha de otro galardón similar, que también quieren presidentes autonómicos del PP.
A nivel autonómico, tal y como anunció en su discurso de investidura, el Gobierno regional puso en marcha una web con el nivel de ejecución de compromisos de esta legislatura. Ahí se detalla que Page ha cumplido ya con el 20% de su programa de Gobierno. También continúa en marcha el Portal de Transparencia de Castilla-La Mancha, el espacio donde mejor se aprecia, en base a sus consultas públicas, la escasa actividad legislativa de la comunidad autónoma en el último año.
Tras el 9J, la última cita electoral (de momento)
Es previsible que tras las elecciones europeas del 9 de junio y el verano, el Gobierno castellanomanchego tome más fuerza. De momento, la consejera portavoz, Esther Padilla, celebra que García-Page haya llegado a su tercer mandato con el aval de “haber llegado a sus compromisos en legislaturas anteriores”.
Destaca hitos como la creación de 11.000 puestos de trabajo, 5.000 personas menos en las listas del paro o conseguir que la región sea la primera autonomía en el Índice de Confianza empresarial. A ello añade 39.000 profesionales sanitarios más.
“Hemos sido la comunidad autónoma que más ayudas ha destinado por motivos de la sequía a nuestros agricultores y además hemos liderado en Europa el hecho de la necesidad de que la agricultura ecológica reciba más ayudas”, ha abundado. En su repaso, la portavoz del Ejecutivo cita más hitos como el Plan 10.000 Vivienda o el aumento de ayudas para huérfanos por violencia machista como medidas más destacadas de este primer año de legislatura.