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Page, a Mazón, tras años de trasvases del Tajo: “Miren por dónde las desaladoras van a ser el invento del siglo. Me apunto”

Más de tres décadas lleva Castilla-La Mancha defendiendo la puesta en marcha de desaladoras en la Comunitat Valenciana para frenar el trasvase Tajo-Segura. Ahora, ante la posibilidad de que el Gobierno autorice trasladar agua mediante barcos-cisterna desde la desaladora de Sagunto hasta Barcelona, el presidente valenciano, Carlos Mazón, ha defendido la “solidaridad hídrica” entre regiones. Y desde Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, no ha podido estar más de acuerdo.

“Hubo gente que estuvo poniendo palos en las ruedas a las desaladoras que se frenaron durante muchos años porque era más fácil tener agua regalada del Tajo que tener desaladoras. Ahora miren por dónde las desaladoras van a ser el invento del siglo. Me apunto también. Y me quedo con la teoría de la solidaridad hídrica del Levante. Agua para beber, sí. Agua para regar, si sobra. Y aquí no sobra”.

De hecho, ha reclamado que Castilla-La Mancha reciba el mismo trato que la Comunitat Valenciana en gestión de recursos hídricos y se le requiera “solidaridad hídrica, eso del agua para todos, sólo si es de beber, no de agua para regar y además si es de desaladora del Estado”.

“Que nos la apliquen a todos”

“Me quedo con esa teoría”, ha manifestado García-Page. “Que nos la apliquen a nosotros”, ha añadido. Se ha referido con ello a la necesidad de dar una respuesta al freno del trasvase Tajo-Segura, que ha definido como “una hipoteca, una herida abierta en esta tierra de manera lacerante”.

En la misma línea que García-Page, el presidente de las Cortes de Castilla-La Mancha y líder del PSOE de Guadalajara, Pablo Bellido, ha defendido que se siente “sorprendido” del planteamiento lanzado desde el Levante, cuando “desde esta región, desde esta provincia, vemos que nos saquean cotidianamente cantidades ingentes de agua que necesitamos para nuestro desarrollo”.

“Pido la misma sensibilidad que se nos ha exigido a nosotros durante tiempo para todo”, ha planteado Bellido. “Y pido también al Gobierno de España que garantice, no solamente el abastecimiento humano de todos los ciudadanos, sino también la posibilidad de disponer de agua para esta tierra, para nuestro desarrollo”, ha añadido, planteando que “la sequía ha venido para quedarse”.

“Estupor” en la cabecera del Tajo: “Ahora parece que el agua del Mediterráneo también es suya”

La Asociación de Municipios Ribereños de los Embalses de Entrepeñas y Buendía ha recibido “con estupor” los “matices” que desde la Comunitat Valenciana exigen ante el posible envío de agua a Catalunya, apuntando que “si las desaladoras están preparadas para socorrer estas emergencias, el trasvase debería cerrarse inmediatamente, primando las necesidades del Tajo”.

“Es intolerable ese discurso patrimonial donde parece que el agua del Tajo es suya y ahora la del Mediterráneo también”, explica el presidente, Borja Castro. “En Castilla-La Mancha llevamos décadas siendo solidarios con otros territorios y ahora que les toca a ellos, vemos que se cargan de matices porque no consideran justo enviar agua para desarrollo económico”, ha añadido.

En ese sentido, Castro recuerda que desde la Asociación no se ha negado nunca el agua para consumo humano, si bien siempre se indica que hace falta una restructuración importante respecto a la demanda, “porque no se puede crecer y crecer, ni a nivel urbanístico, ni a nivel turístico, ni por supuesto a nivel agroindustrial, sin tener en cuenta los recursos y las limitaciones reales de un territorio, porque eso es la definición de insostenible”.

“De la misma forma, exigimos al presidente Carlos Mazón que respete las necesidades de nuestro territorio, renunciando al trasvase como fuente de agua para crecimiento económico y garantizando que en caso de necesidad podamos abastecer a la población”, ha señalado.

Precisamente, en el escenario actual, la Asociación advierte de que es necesario “un cambio de mentalidad”. La agricultura consume el 80 por ciento del agua disponible en España, “hasta la fecha las mejoras de aprovechamiento no han reducido el consumo, sino que han mejorado la productividad y el beneficio, ampliando incluso el consumo de agua y las necesidades de una industria que quiere más y más”.

Recuerdan que los embalses de Entrepeñas y Buendía “son de gestión plurianual, están preparados para hasta cinco años de sequía, garantizando el consumo humano, pero para eso debe respetarse su salud y no pueden estar continuamente sobreexplotados para generar beneficio económico a unos pocos empresarios del Levante”.

“Es necesario, urgente, sustituir el agua del trasvase por fuentes alternativas como la desalación, dejando que el Tajo pueda recuperarse y atender las necesidades de una cuenca que no cuenta con esa alternativa, que es la desalación”, concluyen.

El PP de Castilla-La Mancha centra su discurso en el agua para regar

Y en mitad del debate a cuenta de la sequía en Catalunya, la secretaria general del Grupo Parlamentario Popular en las Cortes de Castilla-La Mancha y diputada autonómica, Lola Merino, ha aprovechado para cargar contra el presidente regional al que acusa de “promesas incumplidas” en materia de agua. En su opinión es un presidente “de secano” que “carece de responsabilidad hídrica en Castilla-La Mancha”.

Mientras García-Page reclama que la región reciba el mismo trato que la Comunidad Valenciana en gestión de recursos hídricos y se le requiera “solidaridad hídrica, eso del agua para todos, sólo si es de beber, no de agua para regar y además si es de desaladora del Estado”, el PP insiste criticar al PSOE por “cargarse” el Plan Hidrológico Nacional, sugiere que aún “no conocemos cuál es su alternativa” (la de Page y su gobierno) y qué “ponen encima de la mesa para solucionar los graves problemas de agua que sufre Castilla-La Mancha”.

El PP castellano manchego centra su discurso en resaltar “los problemas que surgen en el uso agrario, por culpa de la sequía y de la falta de inversiones hídricas que no hace Page”, aunque .

“Hay que preguntar a Page dónde está el agua que debería circular por la tubería manchega, o cuál es la solución para las Tablas de Daimiel o dónde están los 250 millones de euros prometidos para los regantes del Guadiana”.