No es la primera vez que las Cortes de Castilla-La Mancha tratan el tema de las listas. El diputado de Podemos, José García Molina, inició el debate intentando dejar de lado las cifras, y cuestionando las decisiones de mantener las leyes del pasado Gobierno de María Dolores de Cospedal. El parlamentario de Podemos recordó que en el acuerdo de investidura se estipulaba que no se sustituirían recursos públicos para las derivaciones y que se exigiría a los centros concertados cumplirían los mismos estándares que se exige a los públicos.
Además, Molina también señaló que el Gobierno se había comprometido a dar cuenta de las derivaciones y del estado de las listas de espera. “La cuestión no es poner unos números, sino justificar las derivaciones, dónde van, con quén se contrata”, explicó el diputado, quien también criticó que en las comisiones parlamentarias no se ha explicado “nada de eso”. “Sólo han traído tablas comparando lo que pasaba el año pasado y este año. Nos lo podemos creer, pero es poco serio”, aseguró.
Finalmente, García Molina zanjó que el debate debe establecer qué tipo de modelo quiere el parlamento en la región e instó a los parlamentarios a “legislar de una vez” y cambiar leyes “contraproducentes” para los servicios públicos en la región.
pongámonos a legislar de una vez, a cambiar a modificar las leyes que creemos son contraproducentes para los servicios públicos de esta región. Por su parte, la socialista Ana Isabel Abengózar, quiso destacar que actualmente las listas de espera son accesibles “para todos” y son datos “veraces, públicos y transparentes”.
Abengozar insistió también en que la hoja de ruta del PP era “privatizar” la sanidad de Castilla-La Mancha, diciendo que la sanidad pública “no funcionaba” y convertirla en “un negocio privado”. “Nuestro sistema de salud ahora está en el máximo rendimiento, sólo se utilizan las derivaciones como complemento, no como prioridad”. De este modo, la diputada socialista también resaltó que las derivaciones a la privada han llegado a reducirse en un 95% en algunos hospitales como el de la Mancha Centro.
Cierre de camas, la medida “eficiente”
Por parte del PP, intervino el también médico Juan José Jiménez, quien aseguró que las listas de espera crecen actualmente a una media de “mil pacientes al mes”, insistiendo además en que las listas de espera “son cuanto menos engañosas”. No es la primera vez que el 'popular' asegura que las listas han sido manipuladas y Jiménez aseguró también que Page “ni se cree ni le importan” las listas de espera. Pero Jiménez también traía la respuesta al problema y la expuso tras señalar que también han aumentado “exponencialmente” los tiempos medios de espera en los hospitales castellanomanchegos.
Así, el diputado señaló que es “muy fácil” gestionar eficientemente la sanidad con gestores capaces y lo resumió sencillamente en el cierre de camas. “Lo eficiente es cerrar todas las camas que sobran y tener abiertas las que se necesitan”, afirmó. De este modo, detalló que en un hospital con un 60% de ocupación, existe un 40% de camas que están “gastando dinero”. “Por tanto, qué es eficencia: cerrar todas las que no se necesitan”. De este modo, ironizó también con que Cospedal “era mala porque tenía 700 cerradas”, pero Page “es bueno porque tiene abiertas 650”.
El consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz, cerró el debate en el que finalmente se rechazó la resolución propuesta por el PP. El responsable de la cartera respondió a Podemos que la Ley de tiempos máximos es un “compromiso de legislatura” y que ya se han tomado medidas al respecto. Fernández respondió al PP que los titulares que propusieron dibujan “malintencionadamente” la sanidad y su situación en la región. “Con tantas malintenciones no van a encontrar la verdad. Es mucho mejor ir juntos y trabajar juntos sobre las ideas”, aseguró.
Por otro lado, el consejero destacó que la región es la “más transparente” en listas de espera, “además de la pionera” y que el ejemplo ha sido seguida por Madrid y Asturias. Además, Fernández añadió que se incluirán también otros procesos en el portal de transparencia, unos “menores”. La lista de espera “no sólo baja por hacer mucha actividad”, especificó, sino también por gestionar la demanda de entrada de los pacientes, concluyó.