Decenas de personas se concentraron en Casas Ibáñez en la primera protesta contra la tauromaquia. La protesta, convocada por la asociación Casas Ibáñez Contra la Tortura Animal (CI-CTA), arrancó el pasado sábado 28 de agosto frente a la plaza de toros del municipio, media hora antes del inicio de la corrida de toros de la feria.
El público hacía cola para comprar entradas y acceder al recinto mientras el ambiente se llenaba de consignas contra el sangriento espectáculo: “¡Herido estás de muerte si con sangre te diviertes!”, “¡Es tortura: ni arte ni cultura!” o “¡Ni un euro más para maltrato animal!”.
Los vehículos de las cuadrillas de los toreros pasaban por delante de la concentración y, tras los cristales, “se advertían rostros de incredulidad”, dicen desde la asociación. No es para menos, esta ha sido la primera protesta contra la tauromaquia en la historia de Casas Ibáñez, donde, desde el año 2017, un creciente grupo de vecinas y vecinos se organiza contra todo tipo de maltrato animal en la comarca de La Manchuela.
“Algunos de los asistentes a la corrida de toros volcaban rabia y desprecio contra las personas allí concentradas, a quienes lanzaban burlas, insultos y amenazas. De entre los increpadores, un hombre de mediana edad se colocó frente a los manifestantes, se bajó la bragueta y se sacó el miembro, todo ello a ojos de la Policía Local y de una cámara de vídeo. Acto seguido, se compadreó con otro individuo y continuó su paso hacia el interior del recinto”, relatan desde la asociación.
La manifestación y las proclamas antitaurinas duraron alrededor de una hora. A las 19 horas, la plaza de toros cerró sus puertas y la banda de música municipal comenzó a tocar pasodobles. “Adultos y niños, decenas de niñas y niños, celebraron una vez más la sangre y la muerte”, lamentan desde la asociación.
“En lo que va de año 2021, Casas Ibáñez ha sido testigo de dos corridas de toros. La última de ellas, la de la feria, ha recibido cerca de 15.000 euros de dinero público, según ha informado el alcalde, Javier Escribano, a preguntas de concejalías, aseguran desde la asociación Casas Ibáñez Contra la Tortura Animal.
La asociación Casas Ibáñez Contra la Tortura Animal ha valorado como “exitosa” la convocatoria, que este año solo se ha nutrido del boca a boca, sin cartel oficial, y ha anunciado que no cesará en la denuncia de la tauromaquia como “espectáculo sangriento y contrario a los valores de cualquier sociedad democrática”, concluyen.