Como complemento al Plan regional por el Empleo, el Gobierno de Castilla-La Mancha ha aprobado en su Consejo semanal la convocatoria de ayudas, por valor de cinco millones de euros, para financiar planes de formación. Según ha explicado el portavoz, Nacho Hernando, estos planes podrán llegar a casi 6.000 personas de la comunidad autónoma, que podrán elegir entre más de 345 cursos.
Una de las novedades más importantes que ha destacado es que a partir de ahora las entidades formadoras podrán ser también centros acreditados, que darán un certificado de profesionalidad a los usuarios, ya que hasta ahora solo lo podían hacer los agentes sociales.
Se trata de una medida “en paralelo” al Plan Extraordinario para el Empleo y a través de estas ayudas se dará prioridad a las iniciativas que impulsen la innovación y el espíritu empresarial, a las que incluyan prácticas no laborales, a las que mejoren las competencias lingüísticas y ofimáticas, y a aquellas relativas a las tecnologías de la información y la comunicación. Hernando ha añadido que “se valorará de forma muy importante que la formación favorezca a la inserción laboral”.
Por otra parte, el Consejo de Gobierno ha aprobado también la orden por la que se convocan subvenciones para la realización de proyectos de talleres de empleo durante los años 2015 y 2016. Se destinarán en total 11 millones de euros para la formación de 1.200 trabajadores en escuelas taller y podrán acogerse a ellas las entidades locales de Castilla-La Mancha, otros órganos autónomos, consorcios con sede en la región, asociaciones, fundaciones y otras entidades sin ánimo de lucro con sede y ámbito territorial en la comunidad autónoma.
Esta medida también se enmarca en la “gran obsesión” que es la creación de empleo en Castilla-La Mancha, y en la misma, las mujeres víctimas de violencia de género tendrán “prioridad absoluta” para ser seleccionadas como participantes en el proyecto.