Protestas contra el Belén de Caja Rural, “tradición infame” y “posible maltrato animal”

La organización AnimaNaturalis ha organizado este domingo una protesta callejera apoyada por otros colectivos como Equo o Justicia Animal, en las inmediaciones de la sede de Caja Rural Castilla-La Mancha en Toledo como rechazo al Belén viviente que cada año organiza la entidad cooperativa. Un Belén que incluye a más de 70 animales entre los que se incluyen corderos, cabras, ovejas enanas, cerditos, pavos, gallinas, faisanes, palomas, tórtolas, perdices, además de un amplio surtido de aves acuáticas como patos o ánades, entre otros.

Para AnimaNaturalis esta es una de “las tradiciones más infames y degradantes para los animales de Toledo” y el objetivo de la protesta ha sido tanto informar a los viandantes como “presionar” a la Administración para que ponga fin a este tipo de exhibiciones.

Antonio Muñoz, miembro de la organización, explica que intentarán parar esta exhibición de animales en el futuro. “Hay que demostrar que los animales no son objetos a nuestro servicio, sino seres sintientes con sus propios intereses y necesidades”, señala.

“No queremos que dejen de celebrar un acto tradicional, pero sí que lo hagan de una manera respetuosa con los animales”, puntualiza Muñoz, dando como posibles opciones para sustituir a los animales vivos por “maquetas, muñecos, instalaciones artísticas o incluso proyecciones multimedia”.

Los organizadores han leído un comunicado a las puertas de la entidad cooperativa para abogar por la “necesidad” de “promover otras actividades lúdicas llenas de creatividad e ilusión que nos permitan a todos, personas y animales, disfrutar de estas fiestas que están basadas en el amor y el respeto”.

Desde AnimaNaturalis aseguran que los dromedarios, burros, cerdos o diferentes tipos de aves, entre otras especies, pasan en el recinto de la Caja Rural “cerca de 15 o 20 días a la intemperie, con estrés, en un entorno desconocido para ellos y en una situación a la que no están acostumbrados”, explica Muñoz.

El objetivo final de la protesta es que Caja Rural dé marcha atrás a la exhibición de los animales vivos. “Se puede considerar como un posible caso de maltrato animal este tipo de exhibiciones, porque los animales están sometidos a estrés y maltrato psicológico de manera injustificada. Además, pasan semanas en condiciones inadecuadas para su bienestar, no les permiten una movilidad natural, están expuestos a ruidos extraños, luces y presencia de muchedumbre”.

No es la única muestra de protesta, la protectora APADAT Toledo rechaza también la presencia de animales en el Belén de la entidad. Lo hace por sexto año consecutivo y ha iniciado una recogida de firmas que ya se acercan a las 32.000.