Es cada vez más habitual encontrar que el patrimonio en ruinas en manos privadas acabe saliendo a la venta en portables inmobiliarios. En Castilla-La Mancha, donde hay infinidad de monumentos a la espera de ser restaurados, recuperados o rehabilitados ya ha sucedido en más de una ocasión. Y vuelve a repetirse: ha salido a la venta el histórico torreón de vigilancia de la localidad de Mazarambroz, en la comarca de los Montes de Toledo.
Se trata de una estructura situada en una gran finca del pueblo y data del siglo XIV. Con seis siglos de historia, este torreón fue construido para preservar y vigilar la entonces frontera cristiana, y para custodiar los accesos de agua de la zona. Ahora está a la venta por 1,5 millones de euros en un portal inmobiliario online.
Según su ficha de venta, el torreón cuenta con tres plantas y la última se considera el ático, donde existen unas magnificas vistas de Toledo. La venta incluye no solo esta joya patrimonial sino también un chalet familiar en la misma finca, con cuatro dormitorios y un baño. En el exterior hay piscina, jardín y una zona de aperos de labranza.
El torreón aparece en el listado del Ayuntamiento sobre los monumentos y lugares de interés del municipio.
Uno de los casos similares que se han producido en Castilla-La Mancha en cuanto a la venta privada de patrimonio fue en la localidad de Cogolludo (Guadalajara) el pasado mes de enero. Su castillo, en ruinas y en una zona de 1.300 metros cuadrados, salió a la venta por medio millón de euros. “Regalado ya es caro” es la frase con la que muchos vecinos y vecinas de esta municipio bromearon al referirse al emblemático castillo medieval puesto a la venta.