En el mismo día en que Podemos se ha ofrecido a negociar unos nuevos Presupuestos regionales para 2017 antes de su trámite parlamentario y en que el Gobierno regional ha cerrado la puerta a esta posibilidad, instando a que las modificaciones se hagan vía enmiendas, el PSOE ha obviado por su parte a la formación morada y ha señalado directamente al PP como “responsable” de que se aprueben las cuentas públicas de este año.
La diputada regional del PSOE Ana Isabel Abengózar ha valorado el esfuerzo que el Gobierno de Emiliano García-Page está realizando por conseguir cuanto antes la aprobación de unos Presupuestos. Dicho esto, ha manifestado que es necesario que el PP “sea responsable” para que Castilla-La Mancha cuente ya con un presupuesto con el que “seguir reconstruyendo la región”.
A este respecto, ha destacado que se trata de un asunto “muy importante” porque lo que los castellano-manchegos se están jugando es tener casi 400 millones de euros más para destinarlos a políticas sociales y servicios públicos.
Destaca que las nuevas cuentas, que el Gobierno va a remitir en breve a las Cortes regionales, contemplan la recuperación de la mitad del recorte salarial sufrido por los funcionarios y empleados públicos en la pasada legislatura, en concreto, un 3% de sueldo perdido de la llamada 'tasa Cospedal', y lamenta que no hayan podido conseguirse otras medidas “por la oposición del Gobierno de Rajoy”, como la aplicación de las 35 horas de jornada laboral de los funcionarios. Pese a ello, ha pedido al PP que sume “en lugar de poner palos en la rueda para aprobar unos Presupuestos que nos beneficiarán a todos”.
Para que el nuevo texto de las cuentas pueda aprobarse el PSOE necesita o bien el apoyo de Podemos o bien el del Partido Popular. Días atrás, el entorno del presidente regional, Emiliano García-Page, había confirmado a eldiarioclm.es que no se descartaba proponer a los populares que optasen por la abstención técnica a la hora de votar los presupuestos. La tesis se reaviva con la negativa socialista a llegar a un acuerdo previo con la formación que dirige José García Molina. Pero el desenlace sigue siendo una incógnita y la Junta traslada toda la presión a Podemos.