“Es insostenible”, afirma Higinio Grimaldos, agricultor de Torrubia del Campo y una de las personas afectadas por los impagos millonarios de la empresa Cereales Roldán S.L, cuyo administrador es José Pablo Roldán, hermano de la diputada regional del PP por Cuenca, María Roldán. Decenas de familias de pueblos de Cuenca y Toledo se ven afectadas por esta situación, que llevan denunciando públicamente ya desde hace más de un año, incluso en mitines políticos ante la presencia de Aznar o Rajoy.
Hoy se han desplazado hasta Toledo donde se celebraba Pleno en el Parlamento regional. Los afectados han registrado una extensa misiva dirigida al presidente de las Cortes de Castilla-La Mancha, Pablo Bellido, en la que exponen si situación que se remonta al año 2021. La misiva está firmada por más de 80 agricultores. Fue entonces cuando se comenzaron a suceder los impagos, que en algunos casos, como el de Grimaldos, llega al medio millón de euros entre las cosechas de ese año y 2022.
De este modo, piden a Bellido que estudie la situación porque “entendemos que puede haber causa de incompatibilidad legal y sobre todo denunciamos que moralmente no se puede ser diputada regional si al mismo tiempo, que se administra una empresa que no paga a los agricultores y que tiene reiteradamente un comportamiento miserable con todos nosotros, engañándonos antes de las elecciones e ignorándonos y despreciándonos después”, según la carta que han registrado.
La administración concursal encargada de estudiar el caso de concurso de la empresa Cereales Roldán S.L ha emitido un auto, fechado en diciembre de 2023, en el que se señala que hay indicios de que el concurso de acreedores presentado por la empresa no es “al uso”, sino “culpable”. En el documento se señala, entre otras cosas, que “no se aporta explicación razonable a la total desaparición del activo”.
“Esto implica que hay sospechas, porque no se sabe qué ha hecho con la facturación de 2021, que asciende a más de 22 millones de euros. No hay rastros de ese dinero”, explica Mercedes Heras, otra de las afectadas. En el auto se señala también que la empresa tiene deudas que superan los 7 millones de euros en el momento de presentar el concurso de acreedores.
“Nos mienten constantemente”
José Manuel Corrales es otro de los afectados que ha acudido al Parlamento castellanomanchego, y señala que la empresa llegó a recoger cosechas en 2022, “sabiendo que ya no se podía pagar”. Desde entonces, lamenta, no hay “ningún avance”, porque “se niegan a estar con nosotros para resolver, aunque sea parcialmente, la situación”. “No quieren saber nada y nos mienten constantemente”, afirma el agricultor. En su caso, la deuda asciende a unos 90.000 euros, afirma.
“Esto es totalmente insostenible, no podemos sostenerlo. La poca cosecha que hemos tenido ahora no se ha podido siquiera vender”, lamenta Grimaldos. La situación “límite” en la que afirman estar, se describe en detalle en la misiva, en la que aseguran que la empresa del hermano de la diputada María Roldán declina “constantemente” su responsabilidad, incluso con “amenazas”.
Los afectados han presentado distintas demandas, incluida una de insolvencia punible, en los juzgados de Tarancón, además de “numerosas reclamaciones” formuladas por vía notarial. Lamentan que la empresa muestre “graves irregularidades” en su contabilidad.
Pero también lo que lamentan es que nadie del PP haya querido ayudarlos con su situación. Se han reunido con Paco Núñez, presidente del partido a nivel regional, a quien acusan de “cortar las comunicaciones” a la “primera negativa” de María Roldán de reunirse. “Después de ese intento, Núñez se ha mostrado completamente indiferente a nuestro grave problema y lejos de mediar para ayudarnos, muestra su apoyo a María Roldán. Este hecho nos irrita y nos entristece”, describen.
Igualmente, han contactado con la responsable nacional del área de Agricultura y PAC del PP, Mercedes Morán, así como con Miguel Tellado, portavoz del partido, y Carmen Fúnez, vicesecretaria de Organización Territorial del PP.
“Muchas de las familias de la comarca están en situación económica límite debido al impago por parte de Cereales Roldán y hemos tenido que pedir créditos a los bancos. No podemos hacer frente a pagos pendientes y nos supone un grave problema demostrar a la Agencia Tributaria que no hemos cobrado las facturas de los ejercicios fiscales del impago”, resaltan en la carta.
“Creemos que tenemos indicios de delitos fiscales muy graves, que no se deberían pasar por alto”, zanjan.