Han pasado unos quince años desde la última convocatoria de exámenes para la habilitación de guías turísticos en Castilla-La Mancha. Hasta ahora. La consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco, recuerda que, efectivamente, era una situación que el Gobierno regional quería “suplir” al llevar “muchísimo tiempo extendida”.
Fue en 2020 cuando se aprobó un decreto para regular las profesiones turísticas y el inicio de la actividad de las empresas de información turística. Pero antes de llegar a ejecutar el decreto, que preveía convocar exámenes en “seis meses”, llegó la pandemia del coronavirus y todo cambió. También en el sector turístico. “Tras muchos debates aprobamos el decreto, pero nada más publicarse, vino la pandemia. Esto hizo que priorizáramos las ayudas al sector y otro tipo de iniciativas”, explica la consejera. Los exámenes quedaron en un segundo plano y cuatro años después, comenta la responsable regional de Turismo, “afortunadamente, ya vamos viendo la luz”.
Pese al dilatado periodo sin convocarse estas pruebas, solo 84 personas se han inscrito para pasar el examen cuya relación de admitidos se ha publicado este lunes 23 de septiembre. Las fechas están al caer, ya que ya se han enviado al Diario Oficial de Castilla-La Mancha por parte de la Dirección General de Turismo. “Estimamos que a finales de octubre se estarán llevando a cabo las pruebas”, resalta.
Los aspirantes se enfrentarán a tres pruebas: una tipo test con 60 preguntas, en la que hay que acertar, al menos, 40 preguntas, en la que no penalizarán los fallos. La siguiente prueba será el desarrollo por escrito de un tema que se elegirá entre tres, seleccionados por sorteo, por un tiempo de 60 minutos.
La tercera prueba es la de idiomas, con una traducción directa al castellano, sin diccionario, de un texto de temática turística en el idioma o los idiomas que hayan escogido. También se hará una prueba de conversación con los miembros de la comisión evaluadora de la lengua extranjera en la que quieren examinarse.
“Espero que las pruebas sean exitosas para seguir potenciando la actividad turística a través de la generación de nuevas actividades y de nuevos profesionales y que contribuyan a seguir teniendo los datos de turismo que estamos teniendo”, reflexiona la consejera. Patricia Franco resalta que para llegar a este punto en la regulación de la actividad turística, la “interlocución” con el sector ha sido “constante, al más alto nivel”. “Siempre han estado presentes en todas las tomas de decisiones”, afirma.
Y en cuanto a las demandas, la consejera asegura que problemas que ha manifestado tener el sector, como el intrusismo, deben combatirse a través de la Inspección de Turismo. “Lo hemos hecho también en las últimas reuniones que hemos tenido con los guías, en las que hemos abordado que se faciliten las denuncias y que las actas se levanten y se envíen de manera ágil a la inspección de turismo regional para que podamos actuar. Siempre vamos a velar por que no haya intrusismo en los sectores económicos que ejercen su actividad en la región”, destaca la consejera.
Además, Franco destaca que el papel que cumplen los profesionales que se dedican al turismo es “la primera imagen” que reciben los turistas que llegan a Castilla-La Mancha, lo que los convierte en algo “esencial” a la hora de contar “nuestra historia, nuestra cultura y nuestros valores”. “Y hablo en primera persona, como consumidora de turismo, un buen guía o un mal guía puede hacer que tengas una buena o una mala experiencia turística”, asevera.
“El temario es muy pobre”
Valle Vicente es la presidenta de la Asociación de Guías Profesionales de Turismo de Castilla-La Mancha y explica que no había otra opción más que convocar exámenes de este tipo. “Nuestra valoración es positiva”, dice. Eso sí, también lamenta que el temario “no es lo suficientemente amplio” para poder demostrar “conocimientos suficientes” para el desarrollo profesional de la promoción del turismo. “La verdad es que el temario es muy pobre”, señala Vicente.
Empezando por los idiomas. El nivel que se pide, explica Valle, es un B2. “Pero consideramos que con B2 es prácticamente imposible que alguien explique y desarrolle unos conocimientos técnicos, artísticos y mantenga una conversación fluida en un idioma extranjero. Es imposible”, resalta. Y en cuanto a los temas de “arte, cultura, historia, o geografía” de Castilla-La Mancha, la queja es la misma.
“Por ejemplo, un solo tema abarca desde la Edad Media hasta el Renacimiento, algo que evidentemente no tiene mucho sentido”, asegura Vicente. La asociación ya lo ha planteado ante la Junta de Comunidades, que han contestado que se trata de un “temario apropiado” y que “no pueden o exigir unos conocimientos más altos o superiores a los que se pide en otras comunidades autónomas”.
"¿Para qué me voy a presentar a unos exámenes y pasar unas pruebas para tener un carnet de Castilla-La Mancha si puedo continuar trabajando con mi carnet de cualquier otra comunidad autónoma?"
Lo que Valle no tiene claro es si este examen servirá para solventar la “dejación de funciones” que ha mantenido al sector sin esta convocatoria durante 15 años. “Pero es mi opinión personal”, advierte. Y es que el personal que trabaja en la región, ahora mismo, ha obtenido su carné o su habilitación en otras comunidades autónomas, como Andalucía, Aragón o Canarias. “Y evidentemente no es lo mismo explicar el románico asturiano que explicar la catedral gótica de Toledo o los parajes naturales de las islas que los pueblos negros de Guadalajara”, destaca.
Desde la asociación también lamentan el número “muy bajo” de personas apuntadas. “Pero no es algo que no esperáramos, porque a día de hoy nadie tiene la obligación de tener un carnet de Castilla-La Mancha para poder trabajar y desarrollar la actividad de guía turismo en la región. ¿Para qué me voy a presentar a unos exámenes y pasar unas pruebas para tener un carnet de Castilla-La Mancha si puedo continuar trabajando con mi carnet de cualquier otra comunidad autónoma?”, destaca.
Por eso, desde la asociación proponen que tener el carné regional ofrezca algún tipo de “prioridad o valor”. “Ya lo propusimos a la Dirección General de Turismo, pero sabemos que no podemos impedir que cualquier persona o cualquier profesional con un carnet de otra comunidad autónoma desarrolle su actividad en Castilla-La Mancha. Esto lo tenemos muy claro por la Directiva Europea”, destaca Vicente.
Masificación turística y convivencia con la ciudadanía
Valle Vicente explica que esta falta de exámenes ha provocado que sí se note el “bajo nivel de conocimientos” en parte de los profesionales que ejercen su labor y que lleva a escuchar una “cantidad de barbaridades”. Para evitar estas situaciones, Vicente reivindica la pertenencia a colectivos como la asociación regional, en la que sí se organizan cursos de formación, congresos o conferencias. “Intentamos que la gente tenga, al menos, un nivel de conocimientos mínimos, así como una buena praxis”.
También resalta que promueven un turismo que sea amable con la convivencia con los vecinos y que intente evitar la masificación, con grupos de turistas que “no sean muy numerosos” para que no “colapsen las calles”. También abogan por eliminar el uso de altavoces.
En la misma línea se manifiesta la consejera Patricia Franco. “Entre todos tenemos que cuidar la calidad y la prestación del servicio al turista, que cada vez es más selectivo y cada vez es más exquisito en términos generales”. La consejera resalta que en julio se cerró un mes con el “mayor número de viajeros” alojados en un establecimiento de turismo rural. “Es algo muy positivo, al igual que Castilla-La Mancha haya sido la comunidad autónoma de todo el país en la que más ha crecido la ocupación hotelera”, asevera. Franco pone como ejemplo la provincia de Albacete, que es la que está “a la cabeza de todo el país” en estos términos.
“Pero hay que seguir cuidando el turismo, porque competimos con el mercado nacional, con el mercado internacional. Cómo vendemos destino y cómo cuidamos al visitante en todos los ámbitos, sigue siendo esencial para seguir creciendo y generando oportunidades económicas y de empleo en un sector que, además, es nuestro mejor escaparate para vendernos como región”, concluye la responsable regional.