Una fusión entre UGT y CCOO, un planteamiento de futuro para el sindicalismo de clase

El futuro de los sindicatos de clase pasa por la capacidad de autorreforma, re-fundación y re-pensamiento que tenga el propio sindicato, tal como indica José Luis López, exsecretario general de la CONC y ponente este martes por la tarde en la Jornada “El Sindicalismo de clase de ayer y de hoy”.

Algunas de las reflexiones que López Bulla planteó en la jornada, organizada por Comisiones Obreras, fue la refundación de los dos sindicatos mayoritarios en uno sólo: “El problema está también en cómo va a abordar la representación y la relación con los trabajadores y el problema estará en si tardará mucho en crear un movimiento unitario para que CCOO y UGT, hoy un matrimonio bien avenido, sean una sola familia en el panorama del movimiento de los trabajadores”. López dado un horizonte de diez años para esta fusión y ha advertido que, si no se inician estos planteamientos, “el sindicalismo correrá el riesgo de estancarse”. Pero lo plantea desde las bases porque, según afirma, no es posible salir de esta situación sin repensarse a uno mismo.

Junto a López Bulla en esta jornada han intervenido el presente y el futuro del sindicalismo de clase ha pasado por las manos de Joaquín Aparicio Tovar, catedrático de Derecho del Trabajo de la UCLM y Antonio Navarro Escudero, secretario de Política Institucional de CCOO Albacete. Con ellos han contestado a las preguntas abiertas para el encuentro y que llevan al planteamiento anterior: ¿qué tiene que hacer el sindicato para seguir vivo en el presente? Para Paco de La Rosa, secretario provinical de CCOO: “el sindicato se tiene que acercar mucho más a la realidad concreta”. En la actualidad, los sindicatos de clase están muy presentes en la empresa y constituyen un instrumento de apoyo para los trabajadores pero su pervivencia es esencial también para aquellos que están desempleados.