Profesionales de la Unidad de Investigación de la Gerencia de Atención Integrada de Albacete, dependiente del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha, han implantado una técnica que permite ser más rápidos en la obtención del resultado de la prueba PCR para diagnóstico de coronavirus.
En concreto, los profesionales liderados por el doctor Louis Chonco, perteneciente al grupo de investigación en enfermedades cerebrovasculares y neurodegenerativas del doctor Tomás Segura, han desarrollado en la Unidad de Investigación un procedimiento de extracción de ARN (ácidos nucleicos) que reduce el tiempo de extracción de dos horas a 30 minutos, con la ventaja que supone en la agilidad para determinar el resultado final de la PCR (siglas en inglés de 'Reacción en Cadena de la Polimerasa').
Esta prueba de diagnóstico permite detectar un fragmento del material genético del patógeno. En la pandemia de coronavirus, como en tantas otras crisis de salud pública relacionadas con enfermedades infecciosas, se utiliza esta técnica para determinar si una persona está infectada o no con coronavirus.
Para llevarlo a cabo, se puso a punto la técnica de extracción rápida con una solución específicamente diseñada para la extracción de ARN viral a partir de muestras naso-orofaríngeas (COVID-19 Sample Preparation Buffer, ABM®). Este sencillo protocolo permite realizar la extracción de ARN de 24 muestras en treinta minutos, con la ventaja de poder realizarse en el mismo Servicio de Microbiología. Además de agilizar el proceso, el coste de la prueba es cinco veces inferior a los kits convencionales de extracción manual de ARN.
En esta situación de alerta sanitaria, el trabajo del Servicio de Microbiología es fundamental y transversal, puesto que es clave para la toma de decisiones clínicas. La presión asistencial que ha provocado la COVID-19 llevó a ampliar el horario de trabajo del Servicio que se vio además complementado con la colaboración brindada por el Centro Regional de Investigaciones Biomédicas (CRIB) de la UCLM y la Unidad de Investigación de la GAI de Albacete, que han participado, de forma activa, en el proceso de extracción de ácidos nucleicos.
Durante todo este tiempo, los investigadores han estado en contacto directo con investigadores de toda España para trabajar buscando soluciones más ágiles que permitieran acortar el tiempo de procesado de la PCR, las pruebas más fiables en el diagnóstico de la COVID-19.