20 iniciativas legislativas aprobadas y dos fallidas (tramitadas pero no aprobadas), como fueron los Presupuestos regionales de 2017 y la Ley de Mecenazgo Cultural para la región. Es el balance de la IX legislatura en las Cortes de Castilla-La Mancha hasta el 31 de diciembre de 2018.
Jesús Fernández Vaquero ha destacado la intensidad en la actividad parlamentaria de la actual legislatura que termina, antes del último periodo de sesiones que arrancará el 10 de enero y que será “muy cortito”, con media docena de plenos según ha calculado “dependiendo de si hay o o presupuestos”.
La “broma macabra” de unos presupuestos fallidos
A pocos días de cerrarse el año el presidente del Parlamento regional hace balance de los casi cuatro años de una legislatura “normalizada” pero “difícil” que le ha dejado grabada una imagen en concreto: “la cara del presidente” durante el debate de Ley de Presupuestos Regionales, el 7 de abril de 2017, en los que sorpresivamente Podemos votó en contra de unas cuentas previamente pactadas entre la formación morada y el PSOE. “Fue una puñalada bajera impresionante. Nos miramos los unos a los otros y Vicente Tirado me dijo, creo que inconscientemente: Habla con ellos, esto no ha pasado nunca”, comentaba el presidente de las Cortes.
Después ha relatado como el PSOE estuvo “a punto” de llegar a un acuerdo con el Partido Popular - un secreto a voces en el que se llegó a barajar pedir al PP una abstención técnica para sacar adelante las cuentas sin Podemos, aunque este punto fue negado por el portavoz, Nacho Hernando.
La negociación con el PP se realizó, según Vaquero, “en aras a sacar a la región adelante pero la intransigencia de la señora Cospedal y la vuelta de tuerca de la bajada de impuestos que obligaba a perder casi 200 millones en ingresos lo imposibilitó”, ha detallado.
Tras la falta de acuerdo se volvió a la negociación con Podemos. “Se habló de nuevo con ellos tras la broma macabra del último momento” y de ahí a la entrada de la formación morada en el Gobierno de Emiliano García-Page que, según Vaquero, “ha normalizado la situación”, con la excepción según puntualizaba de los desencuentros internos entre el diputado David Llorente y el vicepresidente segundo de la Junta. José García Molina.
“Estamos orgullosos de que Castilla-La Mancha funcione”, ha dicho, a pesar de partir de una situación de “desventaja” porque en los cuatro años precedentes “se desmontó la región”. Para Vaquero, la región es un “referente en políticas sociales y todo tipo de acuerdos en España”.
En su opinión, la legislatura se ha caracterizado por una actividad parlamentaria por encima de la media de las precedentes, no tanto en número de leyes tramitadas como en cuanto a número de plenos (un 7,5% más que en la legislatura de Cospedal) y de comisiones (un 16% más). Y eso, ha reconocido, a pesar de la falta de una mayoría absoluta en la Cámara que “ha complicado la aprobación de las leyes” y ha sido necesario un “esfuerzo importante de consenso”.
“Hemos intentado amortiguar” ha dicho una situación nacional caracterizada por la crispación y “el insulto” porque en Castilla-La Mancha “ha fluido el diálogo, a excepción de determinados casos, con pequeños incendios controlados”.
Hasta la fecha, en las Cortes de Castilla-La Mancha se han celebrado 91 sesiones plenarias y 199 comisiones. Por delante, a falta de lo que pueda incorporarse en el próximo y último periodo de sesiones, están en tramitación dos proyectos de ley. El primero relativo a la ley de creación del Consejo de Formación Profesional de Castilla-La Mancha y el segundo el proyecto de Ley del Estatuto de las Personas Consumidoras.