La consejera de Sanidad de Castilla y León, Verónica Casado, considera que hay que asumir la recomendación “global” de limitar las reuniones familiares durante estos días para evitar la propagación de la COVID-19 porque es “complicado” ir “más allá”.
Casado, durante la presentación de la Estrategia de Prevención de la Conducta Suicida en Castilla y León, se ha referido así a la recomendación del Ministerio de Sanidad de establecer límites en el número de participantes en eventos sociales y públicos y sociales, “especialmente durante las celebraciones de las fiestas navideñas”.
La consejera ha señalado que este miércoles y jueves se celebrará una reunión del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS) en el que se debatirá esta cuestión que, ha incidido, no puede “exceder” de ser una recomendación porque afecta a derechos fundamentales.
En este sentido, Casado ha explicado que preocupan este tipo de situaciones porque se sabe que la incidencia y los brotes aumentan cuando se incrementa el contacto social sin mascarilla, algo que sucede en reuniones familiares.
“Probablemente la recomendación global es algo que podemos asumir, el ir más allá, pues es complicado”, ha señalado la titular castellanoleonesa de Sanidad, quien ha pedido intentar que todos limiten las reuniones familiares, sobre todo cuando no sean del núcleo o “burbuja”.
Así, en este último caso, aunque sea una “pesadez”, llevar mascarilla porque a día de hoy el mayor número de brotes se producen en el entorno familiar y, si esto es así en una época en la que no se producen aún las reuniones familiares que se suelen producir en Navidad, cuando las haya es fácil que se “disparen”. En concreto, con los datos de este martes, el número de brotes de origen familiar activos son 114 en Castilla y León y suponen casi el 40 por ciento del total.
Por eso, ha insistido en seguir las medidas higiénicas como el uso de la mascarilla, el lavado de manos o la ventilación y minimizar el contacto social porque si no se hace desde la “responsabilidad individual” será difícil, ya que “no hay policías suficientes ni leyes suficientes” para poder regular esta limitación, por lo que ha insistido en que la estrategia que sigue pidiendo es la vacunación y la “máxima prudencia”.
Nueva variante
En cuanto a la nueva variante ómicron y el caso que se estudia en el Hospital Clínico de Valladolid, la consejera de Sanidad espera que a finales de semana se tenga un resultado, aunque espera decir que aún no se tienen casos en Castilla y León.
A este respecto, ha recordado que en este caso el estudio se realiza tras un análisis de una PCR en la que se veía un cambio distintos que pudiera corresponder con la variante alfa o la ómicron, pero sin que haya bases epidemiológicas “fuertes” o viajes que pudieran sugerir que se trata de ésta última.
Verónica Casado “espera” decir que no se tienen casos, pero ha advertido de que cuando una variante entra “pensar que no va a moverse es casi ciencia ficción”, como ocurrió con la delta, y si tiene potencia como variante va a ser la dominante, por lo que habrá que hacer es analizar qué impacto tiene.
Aunque sólo se está estudiando este caso, ha aclarado que “todos los días” entran sospechas y ha expresado su confianza en el sistema de alertas porque, ante la “más mínima duda”, se secuencian las muestras.