La concejala de Ciudadanos en San Andrés del Rabanedo (León), Olga Pérez Mieres, ha anuncado este miércoles su dimisión por el “acoso y derribo” sufrido. La edil asegura además que solitará la baja en el partido junto a algunos compañeros más.
“El acoso y derribo hacia mi persona desde julio de 2018, la decepción con el partido a nivel Autonómico y Provincial y las continuas discrepancias con el portavoz del Grupo Municipal, me han llevado a abandonar un proyecto en el que creí e hice partícipe a muchos ciudadanos”, relata. Afiliada desde 2014 por ser un partido que iba a “regenerar la política española”, Pérez dice ahora que esa regeneración “no es posible si no se cuenta con unos principios de ética y de conducta dentro del propio partido”. Enmarca ese presunto acoso en el momento en que dio a conocer al Comité de Garantías y Valores “las presuntas irregularidades cometidas por la Secretaría de Organización en el procedimiento llevado a cabo para cubrir la vacante de coordinador de la Junta Directiva de la Agrupación de San Andrés del Rabanedo”, para lo que se convocaron nuevas elecciones a la Junta Directiva el día 8 de octubre de 2018, y sin que hasta hoy haya recibido “respuesta alguna”
“Desde ese momento he sufrido acoso y derribo hacia mi persona, pues se me ha presionado con un mobbing continuo”, afirma. “El machismo de este partido junto con el aislamiento, la falta de información y comunicación a la que me ha sometido el portavoz del Grupo Municipal han impedido que pudiera ejercer como me corresponde mi cargo de concejal en el Ayuntamiento”, relata. Según Pérez, su nombre y su imagen no podían aparecer públicamente y ello tenía como objetivo desestabilizarla para que abandonase el grupo.
Tras intentar reconducir la situación “de forma interna” y “sin publicidad” y mediante el envío de “solicitudes de amparo a distintos cargos orgánicos e institucionales del partido”, entre ellos a las Secretarías de Organización de León y Autonómica y a las Secretarías de Acción Institucional de León y Autonómicas, solo obtuvo “silencio”. Pero hace una excepción, y se refiere a un escrito de la Secretaria de Acción Institucional de León “cuyo contenido reflejaba su conducta” hacia ella.
“No puedo permanecer en un partido que se compromete a actuar, tanto en las instituciones como en la sociedad, conforme a los principios expuestos en su ideario político, pero en el que realmente ese compromiso brilla por su ausencia, además de todo lo ocurrido en las últimas fechas en Castilla y León” dice antes de advertir que se reserva “el ejercicio de las acciones judiciales”.
Ciudadanos configura un equipo “limpio” tras el caso Enredadera
Sin embargo, desde Ciudadanos vinculan la dimisión de Pérez a un sólo motivo: no estaba en las listas para las próximas elecciones. Las mismas fuentes precisaron que el partido pretende ofrecer un imagen “limpia” y una imagen “potente” sobre todo a raíz de la implicación de dos miembros de Ciudadanos en la Operación Enredadera, el diputado provincial Juan Carlos Fernández y su asesor, Sadat Maraña.
Estos dos hombres eran los que presuntamente recibían dinero por intervenir o informar de concursos públicos en la provincia de León. Según desvelaron fuentes del caso a eldiario.es, Olga Pérez es muy amiga de Fernández. Además, aunque no está imputada en la causa sí que aparece mencionada en las transcripciones de los pinchazos telefónicos. En concreto en una conversación entre el socio y hombre de confianza de José Luis Ulibarri, Ángel Luis García, con su íntima amiga, también de Ciudadanos, Ana Belén, esta se refiere a Olga Pérez como “buena niña” aunque “no se entera de nada”, “no habla”, “no explica dónde fue ni nada”. García le contesta que son cosas “que no se pueden comentar a nadie”. Pérez aparentemente, es también muy cercana a Maraña, que es de quien hablaba la pareja antes de referirse a ella.
Ciudadanos aseguró a este diario que en unos días presentará su nuevo equipo “limpio y de futuro”.