Comisiones Obreras denuncia a las 30 empresas de gestión de incendios de Castilla y León ante Inspección de Trabajo

Comisiones Obreras denuncia a las 30 empresas de gestión de incendios de Castilla y León ante Inspección de Trabajo, según ha anunciado el sindicato en una rueda de prensa este martes. Entre estas empresas, está Tragsa, según han concretado.

El secretario de Organización de la Federación de Industria de CCOO, Juan Manuel Ramos, ha advertido del “riesgo muy alto de estrés térmico” por el calor que provocan los equipos de protección de los bomberos, que impiden la sudoración de los trabajadores y la refrigeración del cuerpo durante los trabajos de poda, desbroce y extinción de incendios.

“A ver si Trabajo sitúa en el sitio adecuado a la Junta de Castilla y León”, ha esperado Ramos, acompañado en la rueda de prensa por el secretario de Acción Sindical, Óscar Ferrero. El gobierno autonómico tiene privatizado el servicio de extinción de incendios en las provincias, por lo que —entiende CCOO— es responsable indirecto de lo que hagan las empresas.

El secretario de Organización de la Federación de Industria ha exigido también que la limpieza de los trajes de protección recaiga en las empresas y no en los trabajadores, que se llevan los equipos a sus casas a pesar de la exposición a agentes “contaminantes y cancerígenos” como el hollín y el benzeno. “El lavado debe correr por cuenta de las empresas o de la Junta. Hay empresas especializadas también”, ha apuntado.

Ramos ha reclamado una profesionalización de los trabajadores de extinción de incendios y que no realicen los tratamientos silvícolas en temporada de verano, sino en invierno, temporada en la que exigen un mayor operativo. “Los incendios se apagan en invierno”; ha reiterado en varias ocasiones, antes de poner un supuesto: “hay que desbrozar en invierno. Ahora, imagínate, con una motosierra de 25 o 20 kilos, el equipo, la pantalla de protección y talando pinos a 33 o 35 grados. Eso es lamentable, y encima están sometidos a rendimientos por hectáreas”, ha reprobado.

“El modelo de la Junta es del siglo XIX. No se ajusta a lo que necesita el monte ni los trabajadores”, ha lamentado Ramos, que también ha considerado “una falta de consideración” el avituallamiento “pésimo” que reciben algunos equipos. “Un poco de humanidad. Es muy triste que les den un bocadillo con pan de ayer y sin apenas agua, o estar ocho horas sin comer nada” ha afeado Ramos, que ha reivindicado que estos problemas de avituallamiento no se vuelvan a producir.