Los sindicatos han rechazado la propuesta inicial de Iveco en la negociación del convenio colectivo para los próximos dos años en la que plantea la congelación salarial en ambos ejercicios, la eliminación de la paga variable en 2020 (fijarla en 500 euros en 2021), no complementar la incapacidad temporal (IT) durante la vigencia de los expedientes temporales de regulación (ERTE) o limitar la antigüedad a ocho trienios.
El Comité de Empresa, que preparará una serie de contrapropuestas, considera “inaceptable” y “desproporcionada” esta propuesta presentada por la Dirección e instan a la empresa a rebajar sus pretensiones porque consideran que son los trabajadores los que hacen los “esfuerzos”, a los que están dispuestos para garantizar la viabilidad, no están dispuestos a “hipotecar” su futuro.
Además de estas propuestas para el convenio, según han informado a Europa Press fuentes de CCOO, la Dirección se ha referido a las previsiones para los próximos meses y ha señalado que el mes de julio inicialmente era “horrible” pero que existe la posibilidad de que se asigne “un pedido de un gran cliente”.
Aun así, habría ERTE en julio y en septiembre la previsión actual es de ERTE “masivo”, pero además se ha señalado que “de cualquier forma” habrá expediente en todos los meses del año, ha añadido CCOO.
El sindicato considera que la situación es “coyuntural” y por lo tanto no ve razonable proponer medidas de carácter “definitivo”, por lo que no comparte que estas medidas afecten al convenio para el año 2021, “máxime cuando ni siquiera existen previsiones para ese ejercicio”.
Situaciones diferentes
En esta línea, ha afirmado que si se va a buscar una solución que afecte en la misma medida a la planta de Madrid y a la de Valladolid el punto de partida debe ser el mismo, pero en el caso de la vallisoletana la situación económica es inferior debido al ERTE de fuerza mayor sin acuerdo.
“Creemos que es necesario solucionar esta situación antes de hablar de ningún otro tema, a lo que la Dirección ha respondido que ese tema no corresponde tratarle en esta mesa”, ha afirmado CCOO, que ha insistido en que “sea en la mesa que sea” debe solucionarse.
Por otro lado, ha calificado de “sorprendente” que propongan la eliminación de la paga variable en 2020 y su reducción en 2021, cuando la empresa siempre ha defendido que este tipo de pagas incentivan a la plantilla a hacer las cosas bien “y cuando ha quedado demostrado que da buenos resultados”.
Respecto a “las prisas” para negociar, CCOO está de acuerdo en que hay que cerrar la negociación lo antes posible porque cree que se debe dar tranquilidad y estabilidad a la plantilla y también a la fábrica, para lo cual “se debe alcanzar un acuerdo que recoja condiciones de los ERTE pasados y futuros”.
CCOO ha señalado que trabajarán con el objetivo de alcanzar un acuerdo “lo antes posible para intentar volver a la normalidad cuanto antes”, ya que la “incertidumbre” genera un “malestar” que se debe evitar porque no es beneficioso “para nadie, ni empresa ni trabajadores”.
En una línea similar se ha expresado UGT, que considera “desproporcionada” la propuesta de la empresa porque asumir un convenio con esas condiciones supondría vincular “todo el sacrificio” a los trabajadores y por ello ha reclamado que la empresa también haga un esfuerzo y “de momento no se ha comprometido a ninguno”“.
Por eso, aunque el sindicato asegura que entiende que la situación económica requiere de estos esfuerzos también pide que se haga cargo de que los trabajadores están inmersos en un ERTE “sin garantías ni complementos”, lo que también les origina un perjuicio económico.
Así, considera inasumible lo propuesto y ha incidido también en que no se pueden comprometer los derechos de los trabajadores a largo plazo porque el problema es coyuntural y por lo tanto requiere de medidas “temporalmente breves” para poder tener una visión más amplia de la situación, tras lo que ha reiterado que cualquier posibilidad de acuerdo ha de pasar por un compromiso de la empresa por el empleo.