Los trabajadores de Siro en Venta de Baños aplazan 4 años el fin de la fábrica: “Veíamos más cerca el cierre que nunca”

Parecía que Venta de Baños, en Palencia, iba a tener un par de años tranquilos con la fábrica de galletas del Grupo Siro. En 2022, tras unas agónicas negociaciones entre sindicatos, empresa y administración se conseguía sacar un futuro para la compañía con promesas de inversión y garantizar los cerca de 1.700 empleos que la marca tiene en Castilla y León.

En este municipio de cerca de 6.500 vecinos las condiciones eran diferentes: tenían dos años para buscar a inversores en la planta. A pesar de que el plazo vencía en 2024, la retirada de dos inversores obligó a tener que volver a la mesa de negociación para garantizar la viabilidad inmediata. Este martes se ha ratificado un nuevo acuerdo que alarga este plazo cuatro años más.

Entre las representantes que han conseguido un nuevo ‘parche’ para la fábrica de Venta de Baños -sumado también el interés de un fondo-, la presidenta del Comité de empresa Marimar Rodríguez confiesa “meses” de trabajo en secreto para llegar a un buen término. “Hemos estado ahí negociando días y días y días para que fuera lo menos posible. Aun así, los trabajadores van a tener que poner de su parte, que ya pusieron cuando el acuerdo anterior”, apunta.

“Estábamos contentos. ¿Cómo no?”

“Se nos ha dado la opción de la continuidad de la planta” valora. “Estábamos contentos. ¿Cómo no? La continuidad de la planta aunque sabíamos que la empresa nos va a pedir algo a cambio”.

Los que la compañía ha logrado es que los trabajadores hayan tenido que aceptar salidas voluntarias, que afectarán a 56 personas, antes del 31 de diciembre 2024, con 33 días por año y 20 mensualidades y una rebaja del salario de unos 130€ a cada trabajador y trabajadora, lo que supone una merma del 20% en algunos pluses, que viene a ser un 5%, más o menos del salario, entre otras medidas, lo que permitirá la viabilidad para seguir con la empresa adelante.

Rodríguez confiesa haberlo pasado peor ante la falta ofertas de la empresa. “Estábamos más que desesperados, porque veíamos más cerca el cierre que nunca”, reconoce. En esa mesa no solo se decía el futuro de los cerca de 240 trabajadores (184 empleados y eventuales), como señala la representante sindical, sino el porvenir del pueblo al haber otras empresas que depende de la factoría de galletas.

“Cuando sale adelante, son los trabajadores los que otra vez tienen que hacer este esfuerzo. Cuesta convencerles”, explica. Ese sacrificio, otra vez, secaba la alegría que hubo en junio de 2022 con el anterior acuerdo: “Cuesta convencerles porque es difícil volverles a hacer entender que son cuatro años, que va a haber inversiones y que iremos viendo poco a poco cómo va la empresa mejorando. Cuesta porque hace cuatro días les habíamos dicho que esos inversores habían desaparecido”.

¿Y ahora qué? Se preguntan en Venta de Baños. La fecha de caducidad de su fábrica de galletas está fijada a cuatro años vista, siempre y cuando se cumpla con lo firmado y no vuelva a pasar como este año.

Marimar confía en que esta continuidad “vaya acompañada, por lo menos, de alguna inversión que garantice este episodio” porque “los dos años que hemos tenido hasta ahora no han invertido nada, porque como la iban a vender o la iban a cerrar, no había inversiones por ninguna parte”.

Según el acuerdo, indica la presidenta del Comité de empresa, los fondos tendrán que llegar en “los próximos meses”, algo que se traduce en que pueda pasar al menos otro año. “Ahora”, dice, “hay que trabajar en que todas esas inversiones se lleven a cabo, que podamos seguir adelante para apretar, qué es lo que van a ver los trabajadores y nos pueda dar tranquilidad”.