La Junta de Castilla y León ha sancionado con 10.000 euros a un agricultor de Palencia por una infracción administrativa grave tipificada en la ley del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad por “la destrucción del hábitat de especies vulnerables” en el paraje Páramo de la Castañeda de Cevico de la Torre tras una denuncia de Ecologistas en Acción.
Según ha informado la asociación en un comunicado, los hechos se remontan al año 2018 tras ser roturadas unas 30 hectáreas de praderas de vegetación natural incluidas en una de las Áreas de Interés para las Aves (IBAs) de la provincia de Palencia, en concreto en la IBA “044--Páramos del Cerrato”, debido a su gran interés como hábitat para especies de aves vulnerables o amenazadas.
Los hechos fueron denunciados por un particular al SEPRONA de la Guardia Civil que tramitó la pertinente denuncia, que junto con otras denuncias de agentes medioambientales, permitió el inició de un expediente sancionador contra el agricultor responsable de las roturaciones.
En mayo de 2021 el Delegado Territorial de la Junta dictó resolución “poniendo fin al procedimiento sancionador, imponiendo al responsable una multa de 10.000 euros como responsable de la comisión de unos hechos constitutivos de una infracción administrativa grave a Ley del Patrimonio Natural de CyL y tipificada en la Ley del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad.
Esto también obligo al agricultor a restaurar la zona en el menor tiempo posible e imponiendo al interesado la obligación de cesar en sus actividades agrícolas como medida necesaria para restaurar la zona dañada.
El Páramo de la Castañeda constituía el hábitat de la única población conocida en la provincia de Palencia de la alondra ricotí o alondra de Dupont (Chersophilus duponti) y albergaba poblaciones importantes de otras especies como alondras, calandrias, cogujadas, currucas, sisones y alcaravanes entre otras.
Un informe de la Sección de Espacios Naturales y Especies Protegidas del Servicio Territorial de Medio Ambiente, realizado a raíz de la denuncia, confirmó que la población había sido censada en varias ocasiones en la zona mostrando una gran estabilidad entorno a las 6-8 parejas reproductoras por lo que “se trataba de una población de pequeño tamaño pero que seguía existiendo”.
La alondra ricotí es una de las aves más amenazadas de la UE y por ello ha sido recientemente clasificada en “peligro de extinción”, máxima categoría de protección del Catálogo Nacional de Especies Amenazadas, uno de los motivos que ha llevado a esta situación es precisamente la destrucción de su hábitat.
“Ecologistas en Acción de Palencia, ante la pasividad del Servicio Territorial de Medio Ambiente, tuvo que denunciar los hechos al Procurador del Común” que dictó una Resolución en octubre de 2021 indicando a la Junta que “se acuerde por el órgano competente de la Administración autonómica la incoación del oportuno expediente sancionador” y “la imposición de las sanciones que procedan garantizando la preservación de los valores naturales descritos en el informe elaborado por la Sección de Espacios Naturales y Especies Protegidas”.
Después de la Resolución del Procurador del Común, la asociación ecologista tuvo que recurrir al Comisionado de la Transparencia para que desde la Junta de Castilla y León se informara de los pasos que se estaban siguiendo en el procedimiento para que los hechos denunciados no quedaran sin castigo y el expediente olvidado en un cajón.
“La última notificación recibida indica que el denunciado ha presentado solicitud de aplazamiento y fraccionamiento del pago de la multa y que no existe un Plan específico de restauración