En el tercer día de las excavaciones en el cementerio de Villadangos del Páramo en búsqueda de los restos de decenas de fusilados en 1936, la memoria colectiva se hizo más presente que nunca en forma de homenajes en la propia localidad y en la ciudad de León. Y lo hicieron acompañados de vecinos y vecinas, de la Asociación para la Recuperación para la Memoria Histórica y de artistas que mostraron su apoyo.
Por la mañana del sábado, además de continuar con las excavaciones en las que ya se han descubierto al menos cinco cuerpos de represaliados, tuvo lugar un emotivo homenaje en la Casa de Cultura de Villadangos del Páramo. Este acto se celebró además en el mismo lugar donde en agosto del 2021 una polémica votación vecinal intentó evitar la búsqueda de fusilados en el cementerio, “un acto de dolor adicional innecesario”.
En Villadangos la palabra corrió a cargo de los familiares de las víctimas, que explicaron quiénes eran sus antepasados a modo de desagravio donde hace unos meses les habían negado sus derechos fundamentales. Pero también hubo agradecimiento a los vecinos de Villadangos que han ayudado con sus testimonios en la búsqueda, y recordado a aquellos que hace más de 80 años rescataron los cuerpos del monte para darles un mínimo de dignidad enterrándolos en fosas del cementerio.
La palabra, escrita en este caso, hizo posible que una familia más se uniera a la búsqueda de sus seres queridos este mismo sábado. Los hermanos Javier y María Luisa acudieron al ver publicado el nombre de su abuelo, Narciso Robles, como una de las posibles víctimas, y ser conscientes de que en la familia se había comentado que fue asesinado en Villadangos, aunque la historia, como en tantas otras familias, ha sido tabú durante mucho tiempo. La apertura de las fosas abre la posibilidad de encontrar al fin a su abuelo, que consideran “de justicia” tras tantos años de silencio y de dolor. Junto a ellos otras dos familias de desaparecidos se han unido en los últimos días a la veintena que ya lo hacían desde hace años.
Ya de tarde en un teatro de León tuvo lugar el segundo homenaje de la jornada. Con los familiares portando imágenes con la historia de los fusilados sobre el escenario por allí pasaron actores, escritores y músicos para mostrar todo su apoyo a la búsqueda y homenaje a los fusilados en Villadangos del Páramo en 1936.
El actor Juan Diego Botto reivindicó con la leyenda del barco de Teseo que “somos porque otros nos recuerdan, lo que nos dota de identidad es el recuerdo que de nosotros tienen los demás”, denunciando además que en España “durante muchos años se nos ha pretendido robarnos la memoria de lo que fuimos, de los que lucharon por construir un país más moderno, más decente, más igualitario”. Y este acto de homenaje se trataba de festejar una victoria, poder abrir las fosas y buscar a quienes llevan 86 años enterrados sin identidad, “hoy celebramos una victoria, una victoria contra la desmemoria. gracias al tesón y empeño de muchos familiares”, señaló el actor.
El periodista Carlos Hernández recordó la historia del campo de concentración de San Marcos de León, hoy hotel de lujo, por donde pasaron la mayoría de las víctimas de Villadangos. “España no va a ser una democracia plena hasta que no recupere su historia real”, señaló Hernández para recordar que hubo “una eliminación física absolutamente programada”, incluso en zonas donde la guerra apenas duró como fue el caso de León. El periodista lamentó que en las escuelas no se enseñe de verdad la historia de España, como la existencia de los 300 campos de concentración que hubo durante la guerra y posguerra. “Los asesinados siguen sin ser considerados héroes, porque así se les considera a las víctimas del fascismo en el resto del mundo. Y aquí todavía tenemos que seguir reivindicando”, señaló.
Una de las familiares en búsqueda de su abuelo, Susana Toral, celebró que “La verdad siempre encuentra su camino y ha salido en Villadangos el 24 de febrero de 2022”, recordando el duro trabajo previo de años de preguntas e indagaciones hasta lograr abrir la fosa. Con especial cariño se recordó a Rufino Juárez, que buscaba a su padre en Villadangos, y falleció el año pasado tras la negativa vecinal y las trabas burocráticas que retrasaron la búsqueda hasta este 2022, “Rufino tenía que haber vivido esto”, rememoraron. Su nieta Mercedes recordó la lucha de Rufino por encontrar a su padre, asesinado cuando él apenas tenía 2 años, con toda una vida indagando para encontrar sus restos y que pudieran estar enterrados junto a su esposa. “Que no se calle más lo que tanto tiempo ha estado en silencio”, valoró agradeciendo el cariño recibido.
Emilio Silva, presidente de la ARMH, se mostró muy crítico con el dolor que sufren las familias ante la falta de apoyos públicos para la búsqueda de víctimas, “Miles de personas han muerto esperando que la democracia girara la cara y les mirase. Al Estado le tienen que molestar los dolores de todos sus ciudadanos, tienen que mirar al daño y tienen que repararlo. Por eso Silva consideró que ”Sentido de estado tienen los que cavan la fosa sin descanso“ lamentando que ”Este país ha tirado a la basura el tiempo de miles de personas y nunca va a reparar el daño causado“. La asociación financia con sus propios recursos las excavaciones de Villadangos, sin ningún tipo de ayuda pública, que rechazan al considerar que la búsqueda debía ser una política de estado.
La periodista Olga Rodríguez, también familiar en busca de su bisabuelo, denunció la falta de avances en España en materia de derechos humanos y reparación de los crímenes del franquismo, ·Cómo es posible que en lugares que no son del primer mundo haya procesos de justicia y que aquí sea tan difícil recuperar la memoria. Rodríguez explicó el proceso de dolor que provoca tener un desaparecido en la familia, --“es una ley natural poder enterrar a nuestros muertos”- y celebrando que con la apertura de las fosas se abren también las palabras, “se rompe la tierra y se rompe el silencio e incluso el miedo que todavía hoy hay en algunos lugares”.
El acto de memoria contó con mensajes de apoyo mandados en video de Penélope Cruz, Aitana Sánchez Gijón, Manuel Rivas, Sergio Peris Mencheta y Javier Bardem, deseando ánimo a los familiares para que puedan cerrar las heridas de la forma más justa posible. Además las intervenciones de Rozalén, Isamil9, Cuco y Luis Pérez, Juan Carlos Mestre y Sol Gómez Arteaga emocionaron un teatro lleno para reparar lo que durante 86 años no ha sido posible. Las fosas se han abierto y las heridas empiezan a cerrarse.