Castilla y León reformará la regulación de viviendas y apartamentos turísticos

La Dirección General de Turismo de Castilla y León está impulsando la elaboración de una nueva regulación tanto de las viviendas de uso turístico como de los apartamentos turísticos, para adecuarla a las nuevas necesidades y demandas del sector y de los intereses generales de la sociedad.

Esa modificación se pretende hacer en una única disposición; se han presentado en el Consejo Autonómico de Turismo de la Comunidad unos criterios para regularlo y se contará con las aportaciones y sugerencias del sector turístico, han informado a EFE fuentes de la Consejería de Cultura y Turismo.

El número de viviendas turísticas en Castilla y León se calcula en 4.592 y el de apartamentos en 560, lo que supone un total de 5.152, según los inscritos en el departamento de Turismo de la Comunidad a fecha 28 de junio.

La cantidad de viviendas y pisos turísticos inscritos se ha calculado en 1.010 en Ávila, 611 en Burgos, 931 en León, 107 en Palencia, 827 en Salamanca,542 en segovia, 299 en soria, 348 en Valladolid y 477 en Zamora.

Teniendo en cuenta la cantidad y diversidad de municipios que existen en Castilla y León los problemas derivados de esta cuestión son muy variados y están condicionados, principalmente. por la ordenación urbanística del municipio de que se trate.

La normativa vigente abarca el Decreto 17/2015, de 26 de febrero, por el que se regulan los establecimientos de alojamiento en la modalidad de apartamentos turísticos en la Comunidad de Castilla y León.

También incluye el Decreto 3/2017, de 16 de febrero, por el que se regulan los establecimientos de alojamiento en la modalidad de vivienda de uso turístico en la Comunidad de Castilla y León.

En ambas disposiciones se recoge la necesaria obligación de cumplir con la normativa sectorial que resulta de aplicación: “Las edificaciones o emplazamientos donde se ubiquen los establecimientos de alojamientos en la modalidad de apartamentos turísticos deberán cumplir la normativa vigente.

En concreto deberán cumplirla en materia de urbanismo, construcción y edificación, sanidad y consumo, seguridad, prevención de incendios, protección civil, accesibilidad y supresión de barreras físicas y sensoriales, higiene, protección de medio ambiente y cualquier otra que resulte de aplicación.

Entre esa normativa destaca la derivada del planeamiento urbanístico o la legislación de propiedad horizontal que regula los acuerdos de las comunidades de propietarios, que pueden condicionar el ejercicio de la actividad turística.

Además, si se ejerce esta actividad de alojamiento turístico sin haber presentado la previa y preceptiva declaración responsable para desarrollar esa actividad turística, será sancionado.

La infracción por esos hechos está tipificada en el Ley 14/2010, de 9 de diciembre, de Turismo de Castilla y León como infracción muy grave, con sanciones que van de 9.001 a 90.000 euros.

Respecto a la regulación en capitales de provincia, en el caso de Salamanca fuentes del Ayuntamiento han señalado que desde el equipo de gobierno se sigue trabajando en la elaboración de una ordenanza para regule los pisos turísticos y que saldrá a la luz en breve.

Han remarcado que en esta ciudad “no existe un problema”, pero que la próxima regulación se adaptará a la nueva realidad.