No es un acuerdo “formal”, pero corresponde a la Consejería de Empleo tramitarlo y el Gobierno no entra a discutirlo. El portavoz de la Junta de Castilla y León, Carlos Fernández Carriedo, se ha enredado este jueves en vagas explicaciones sobre la decisión que anunció el pasado lunes el vicepresidente, Juan García-Gallardo. Los planes de la Consejería de Empleo e industria pasan por recortar 20,3 millones de euros en las subvenciones que reciben los sindicatos y patronal en Castilla y León por considerar que se trata de un gasto “superfluo”. Así, las subvenciones directas que reciben se reducirán un 50%. La decisión se comunicó en una rueda de prensa mientras el presidente de la Junta se encontraba en Madrid, en la firma del acuerdo que ha paralizado el cierre de la galletera palentina Ceralto Siro.
Con los sindicatos y la patronal en pie de guerra ante una medida que conocieron a través de los medios de comunicación y adornada con los epítetos de “ultrasubvencionados” y “apesebrados”, la Junta pretende calmar las aguas con una reunión con los afectados para la que ni siquiera hay fecha y que será, según Fernández Carriedo “una que venga bien a todas las partes”.
En la rueda posterior al Consejo de Gobierno, el portavoz no ha querido responder sobre si se conocía previamente el contenido de la rueda de prensa que dio García-Gallardo. Fernández Carriedo ha rehecho la pregunta para cuestionar: “¿Sabíamos el hecho de que hay un acuerdo para la formación del gobierno?¿Si hemos constituido un acuerdo para evaluar las políticas de gasto público, mejorarlas y ver qué gastos son los esenciales? Lógicamente esto lo sabemos, y sabemos que las consejerías competentes son quienes deben hacer esa evaluación, naturalmente que sí”. Carriedo no se ha pronunciado sobre la rueda de prensa 'contraprogramada' pero tampoco sobre sus consecuencias ha sido claro, si bien ha insistido en “no focalizar el diálogo social en las partidas que recibe” sino en el propio diálogo.
Deciden las consejerías
Lejos de precisar qué se va a tratar en el encuentro con los integrantes del Diálogo Social, el portavoz de la Junta ha insistido en que lo importante es la “mano tendida” y la “capacidad de llegar a acuerdos”, pero no ha acabado de concretar si el recorte del 50% es una decisión negociable en sí y qué sentido tendría una reunión para confirmar que las partidas que antes les daba la Consejería de Empleo serán de 20,3 millones menos. Carriedo ha repetido varias veces que no se trata de un “acuerdo formal” sino que está aún por tramitar, si bien sí ha llegado a reconocer que cada consejería decidirá sus recortes dentro de esa política que impone Vox de eliminar “gastos superfluos”.
Para aligerar el calado que tiene la imposición de Vox, el portavoz ha subrayado que no va a suponer una ruptura del Diálogo Social, sino que se tratará de “llegar a acuerdos que tengan como fin mejorar la vida de trabajadores y empresas. ”Me gustaría que una cosa no pusiera en riesgo la otra, creo que todos tenemos que hacer el mayor de nuestros esfuerzos para que estos acuerdos sean útiles y que el Diálogo Social cumpla su función y mejore mejorar el día a día“, ha afirmado.
Tampoco ha querido opinar sobre los posibles recortes que anuncia otra consejería dirigida por Vox, la de Agricultura. “Las consejerías, en el ámbito de sus competencias, analizarán como realizar estas reducciones de gasto”, ha apuntado. Aún así, el portavoz sí ha señalado que un momento de “incertidumbre económica como el actual”, es “obligado” estudiar y adaptar políticas públicas para decidir donde se pueden hacer los recortes adecuados.
Por último, al conocer el comunicado de la CEOE en el que la patronal lamenta “desde su más absoluta incredulidad, tanto por las formas de hacer público tal anuncio por el vicepresidente de la Junta, como por el contenido de los mensajes lanzados con calificativos impropios de una sociedad democrática y que cuestionan de forma injustificada el papel del empresariado”, Carriedo sólo ha acertado a decir que en la Junta estarán “encantados” de escucharles en la reunión aún sin fechar.