El portavoz de Castilla y León se inventa que Garzón pidió a los extranjeros que no consumieran carne española

El portavoz de Castilla y León, Carlos Fernández Carriedo, se ha inventado que el ministro de Consumo, Alberto Garzón pidió a los extranjeros en una entrevista en The Guardian que no consumieran carne española. “Pide a los consumidores de fuera de España que dejen de consumir la carne producida en España no por su impacto sobre el cambio climático, sino porque es una carne de muy baja calidad y basada en el maltrato animal”, ha acusado Carriedo al ministro.

Alberto Garzón criticaba en la entrevista a las macrogranjas -“contaminan el suelo, contaminan el agua y luego exportan esta carne de mala calidad de estos animales maltratados” mientras ensalzaba la ganadería extensiva de varias comunidades -Castilla y León, Andalucía y Extremadura-. Carriedo ha reprochado que el Gobierno “lance el mensaje de que la carne producida en España no es carne de calidad”. “Pone en riesgo nuestras exportaciones y actividad productiva”, ha advertido.

El portavoz del gobierno autonómico ha reclamado la dimisión del ministro de Consumo y ha pedido al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que promueva el cese de Garzón por “plantear que la carne no es de calidad y se basa en el maltrato animal”. También ha aludido a la “alarma” que -dice- generó el ministro al recomendar una reducción de la ingesta de carne por la contaminación y los efectos de la ganadería industrial sobre el cambio climático.

Carlos Fernández Carriedo ha lamentado que se “desprestigie y perjudique” al sector “que lo está pasando mal en este momento con el importante aumento de los inputs de combustibles, productos energéticos, fertilizantes, o en el caso del sector ganadero, los piensos”.  

Ante la matización de las declaraciones de Garzón, Carriedo ha criticado que los consumidores británicos no se enteren “si la matización no aparece en The Guardian” y teme que se quede “con la idea de que la carne producida en España es de baja calidad”. “Esperamos que el Gobierno defienda los productos fabricados en España para exportarlos, no todo lo contrario”, ha zanjado.