El alcalde de Valladolid y portavoz de la Ejecutiva federal socialista, Óscar Puente, ha señalado que aunque el Partido Popular y Ciudadanos ven el pacto que se negocia entre PSOE y Unidas Podemos con los independentistas catalanas “casi como una maldición divina”, no les preocupa “tanto como dicen”, porque si fuera una preocupación real se abstendrían para facilitar el Gobierno de izquierdas.
Así lo ha señalado el dirigente socialista en una entrevista concedida a Europa Press el pasado 19 de diciembre poco antes de que se conociera el pronunciamiento del Tribunal de Justicia de la UE sobre la inmunidad del líder de ERC Oriol Junqueras, en la que ha considerado que su partido lleva “muy bien” esas negociaciones, aunque ha apostado por tener “paciencia” y dejar que se siga el trabajo “con seriedad y discreción”.
En todo caso, al ser preguntado sobre si le gusta que el acuerdo de Gobierno tenga que depender de partidos independentistas catalanes como Esquerra Republicana de Catalunya, ha reconocido que “cualquier otra cosa que no sea una mayoría muy amplia del PSOE” no le entusiasmaría, si bien ha matizado que eso es “irrelevante” porque entiende que en la política que hay “tantas cosas que a uno no le entusiasman” pero tiene que gestionarlas.
Para el portavoz de la Ejecutiva federal es más relevante que el partido “sea capaz de gestionar esta complejidad y asumir que este es el escenario que los ciudadanos han decidido”, pero también ha reclamado que deben asumirlo otras formaciones políticas.
En este sentido, se ha referido a los líderes de Partido Popular y Ciudadanos, quienes ven el pacto “como si fuera una especie de maldición divina”, cuando, ha recalcado, es “la voluntad del pueblo, lo que los ciudadanos han determinado”.
Por ello, ha reiterado la propuesta de que “si tanto les preocupa la patria, lo tienen fácil”, con una abstención en la votación de investidura del candidato socialista, Pedro Sánchez, que permitiría el Gobierno acordado entre PSOE y UP. Sin embargo, ha apuntado que no están “dispuestos a tanto”, por lo que ha reclamado que “no vendan como preocupación algo que, si realmente lo fuera, tendría una salida bien sencilla”.
Por ello, ha subrayado que a dichos partidos “la patria les preocupa un poco menos que sus intereses electorales directos”.
Óscar Puente también ha querido marcar diferencias entre esta petición de abstención al PP y al PSOE con la que el 'popular' Mariano Rajoy obtuvo después de que los socialistas forzaran en 2016 la salida de Pedro Sánchez como secretario general ya que considera que entonces la abstención de los socialistas “no era necesaria” para lograr una mayoría absoluta como apunta que se demostró, por ejemplo, en la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado.
“Nosotros no nos oponíamos a que el señor Rajoy formase un gobierno con otras formaciones políticas de derechas, incluidas algunas formaciones nacionalistas”, ha defendido Óscar Puente, que ha recordado que el PP en aquel momento pactó con partidos de esa tendencia “para elegir la Mesa del Congreso o para aprobar los Presupuestos Generales del Estado” de 2018.
En definitiva, Puente ha justificado el que el futuro Gobierno de Pedro Sánchez dependa del independentismo catalán es una cuestión de “aritmética parlamentaria”, que ha reconocido que “es la que es”.
“Con estos bueyes hay que arar y esto es lo que lo que el electorado español ha decidido, así que a eso nos tenemos que ajustar, nos guste más o nos guste menos”, ha señalado el alcalde vallisoletano tras reflexionar sobre las diferencias que se han dado entre los resultados de los comicios de abril y los últimos de noviembre.
También ha insistido en que los políticos no pueden pedir una tercera opinión a los ciudadanos, que ya se han pronunciado en dos ocasiones con un resultado “muy similar” en el que los cambios “menores” han sido el paso de Ciudadanos a la “casi irrelevancia” después de haber rechazado ser “un aliado potencial” del PSOE y que la extrema derecha ha crecido también de manera importante“.