La Asociación de Empresarios de la Hostelería de León ha exigido esta mañana a la Junta de Castilla y León, y en concreto a su presidente, Alfonso Fernández Mañueco, al vicepresidente Francisco Igea y la consejera de Sanidad, Verónica Casado, que asuman sus responsabilidades políticas ante una “nefasta gestión” y decisiones “poco afortunadas” y que provocan unas “heridas de muerte” al sector.
“La hostelería de León está herida de muerte y con ello los empresarios leoneses estamos cada vez más desesperados y arruinados por culpa de sus medidas restrictivas”, han censurado en su manifiesto.
Encabezados por el presidente de Hostelería de León, Martín Méndez Prieto -y arropados ante la Delegación Territorial de la Junta en León por aproximadamente medio centenar de hosteleros de la asociación-, han exigido que “de una vez por todas” se pongan en marcha ayudas directas de la Junta para paliar en algo los daños que siguen causando unas restricciones que aún se mantendrán dos semanas más y que sólo deja las terrazas disponibles para trabajar.
“León, al igual que el resto de provincias castellano-leonesas, paulatinamente va languideciendo. Su economía descansa, principalmente, en la hostelería y el comercio, y ambos sectores son los más castigados por sus medidas restrictivas. Los carteles de ”Se vende“ y ”Se traspasa“ son puñales que se clavan en las ilusiones de quienes un día, con gran esfuerzo e imaginación, dieron alegría y vida a nuestra ciudad y provincia”, han destacado.
También asegurado que el sector no es “la causa de la pandemia ni la razón de su permanencia”. “Mientras estaban cerrados nuestros establecimientos, ocupamos los más altos índices de contagio, al mismo tiempo que otras comunidades autónomas, con medidas mucho más permisivas, han estado mucho mejor posicionadas que Castilla y León”, han defendido.