“Haciendo como que hace compostaje, el gestor de residuos de la ‘planta de de Fuentepelayo’, y un extrabajador remueven los lixiviados generados por la putrefacción de las toneladas de basura que aún permanecen en las instalaciones, a horas intempestivas de la noche y en los fines de semana, de tal forma que los malos olores han vuelto a las calles, patios y casas de esta Tierra de Pinares”, denuncia la plataforma ciudadana 'No Más Mierda'.
Esta asociación destaca a través de un comunicado que recuperar el olor de las viviendas y la ropa “no es sencillo”. “El olor a putrefacción, con intensidad parecida a la de 2015 y 2016 ha vuelto estos días”, lamenta. “Los líquidos que rezuman de los montones de basura, al pudrirse, son los lixiviados que se concentran en las balsas irregulares que hay en las instalaciones de la planta. Una vez llenada una cuba, o cisterna de tractor, proceden a regar los montones como si estuvieran realizando la operación de compostaje. De esta forma provocan unos olores insoportables en el interior del casco urbano”, informa 'No Más Mierda'.
La sentencia del 21 de enero de 2020, que dictó el Juzgado de lo Penal de Segovia, aún no es firme, puesto que fue recurrida por el abogado defensor del acusado y de su empresa Agramam, y en eso se basa el Gobierno Municipal de Fuentepelayo para no actuar, “aunque esté creando molestias a las personas que viven en el municipio”.
Sin embargo, los hechos que se juzgaron y que dieron lugar a la sentencia condenatoria eran anteriores a febrero de 2016, por tanto la situación actual no han sido juzgada aún y la administración pública municipal “debería actuar en consecuencia, sin escudarse en la sentencia de enero, que nada tiene que ver con lo que pasa en estos momentos”. 'No Más Mierda' reprocha a la Alcaldía que se “inhiba” mientras toda la vecindad “sufre las consecuencias provocadas por la mala gestión de la planta”.