CCOO denuncia la comida “insípida, caducada e incluso con moho” que el Sacyl suministra a los sanitarios

La manutención que los profesionales sanitarios reciben durante el ejercicio de las guardias en la atención primaria vuelve a estar en el punto de mira. Comisiones Obreras denuncia la “baja calidad” de las comidas, con productos “sin sabor, caducados e incluso en ocasiones con moho” que los sanitarios tienen que comer si solicitan la manutención a la que tienen derecho.

Una situación que se ha repetido en los últimos años y que continúa después de que la Junta de Castilla y León haya renovado el contrato con Eurest Colectividades SL. para el 2025 y 2026, a razón de cinco millones de euros anuales. En el año 2019, el Ejecutivo autonómico tuvo que dar un ultimátum a esta empresa para que cumpliera con la calidad necesaria en los alimentos.

Sin embargo, Comisiones Obreras ha denunciado de nuevo que “nada ha cambiado”. Mario Amo, secretario técnico de acción sindical del sector sanitario ha explicado que la empresa “envía sus productos precocinados” con “comida caducada”. Amo ha señalado también que desde Sacyl “no han hecho nada para revertirlo”, por lo que han realizado esta encuesta para “hacer objetivas las críticas”.

La encuesta pregunta sobre varios aspectos de la comida, con valores del 1 al 10. Ninguno de ellos llega al aprobado: sana (2,45), sabrosa (2,53), abundante (3,51) y buen producto (2,25). El sondeo señala también que el 98,1% de los encuestados preferiría comida de un local cercano, que el 43,1% se ha planteado traer su propia comida de casa y el 49,1% ya la trae de su hogar.

“Sacyl se lava las manos”

El sindicato recuerda que no es la primera vez que se realiza esta denuncia, pero que los productos siguen siendo de “dudosa calidad y salubridad”. Cada menú cuesta diez euros (más IVA) y que la empresa los factura aunque no se soliciten. Es decir, si en un centro de salud de cinco profesionales de guardia, solo solicitan la manutención dos de ellos, la empresa sigue “cobrando” por las cinco comidas.

Dulcinea Álvarez, coordinadora de FSS-CCOO en León, ha insistido en que los alimentos que les llegan a los sanitarios “no cumplen con ninguna condición de la OMS” y que están llenos de productos conservantes como “sulfitos”. “Es difícil conservar unos macarrones que llevan 15 días cocinados, la comida suministrada dista mucho de unas condiciones nutricionales óptimas”, ha añadido Álvarez, que es profesional en un centro rural en la provincia de León.

Desde Comisiones Obreras plantean dos posibles soluciones. Por un lado, que sean restaurantes o locales cercanos a los lugares de trabajo los que se encarguen de cocinar la manutención de los sanitarios para “inyectar esos cinco millones de euros anuales en estos locales y no privatizar el servicio”. La segunda medida sería aumentar la plantilla de las cocinas de los hospitales para que se encarguen de cocinar el menú cada día.

El sindicato explica que con esto se evitarían problemas de calidad, el servicio dejaría de ser privado y, además, se eliminarían los residuos que se generan al estar todas las comidas empaquetadas en envases que no son reciclados y que Sacyl tampoco recicla.