Ecologistas en Acción de Zamora ha atribuido al “uso indiscriminado de plaguicidas” la situación que se ha generado en municipios de las provincias de Zamora y Salamanca del entorno del embalse de Almendra, que ha llevado a declarar no potable el agua de la red de abastecimiento en 56 pueblos salmantinos y a no recomendar su consumo en 48 de la provincia de Zamora.
La situación afecta a más de 10.000 habitantes de esas localidades agrupadas en 21 municipios zamoranos y 22 salmantinos, aunque los afectados pueden llegar a duplicarse o triplicarse si se tiene en cuenta el incremento de población que experimentan estos pueblos en verano.
Ecologistas en Acción de Zamora ha indicado en un comunicado que se ha puesto en riesgo la salud de los 48 pueblos zamoranos que se abastecen de ese embalse, que cogen el agua de una toma próxima a la de los pueblos salmantinos, aunque en los de Zamora aún no se ha prohibido oficialmente su consumo y en cambio en los de Salamanca no se puede consumir desde más de una semana.
Aunque en los municipios zamoranos, que suman una población de unos 6.500 habitantes, no existe aún prohibición porque los últimos análisis oficiales de los que se disponen aún no arrojan niveles por encima del máximo permitido, en los de Salamanca, que tienen unos 4.300 vecinos censados, el agua se declaró no apta para el consumo por un exceso de plaguicidas el pasado 20 de julio.
La organización ecologista ha lamentado que la mancomunidad Sayagua que abastece a los pueblos zamoranos haya recomendado no consumir el agua pese a sostener que no tiene constancia de anomalías en las analíticas, “sin especificar de qué fecha” son esas analíticas, ha advertido Ecologistas en Acción.
Ha agregado que no comprende “el retraso en la toma de decisiones” en la provincia de Zamora cuando la Mancomunidad Cabeza de Horno de Salamanca declaró el agua no apta por la existencia de plaguicidas y ambas mancomunidades toman el agua del mismo embalse del río Tormes.
Además, el aviso de la Mancomunidad Sayagua en el que recomienda no consumir el agua por precaución sigue sin ser expuesto en el tablón de anuncios de algunos municipios y de sus pedanías, como en el caso de Gáname, mientras que en otros pueblos como en Torregamones ya han iniciado el reparto de agua embotellada.
Ecologistas en Acción ha asegurado que en los pueblos salmantinos en algunos casos los niveles de plaguicidas y pesticidas del agua que sale por los grifos de las viviendas son hasta cinco veces mayor que los permitidos.
Para la organización ecologistas, las instituciones de Castilla y León parecen desconocer que la nueva normativa europea sobre aguas potables implica un mayor control de estas sustancias.
Ha recordado que los plaguicidas acumulados en las aguas ponen en peligro la vida de animales y vegetales acuáticos, pero además se tiene constancia de que algunos son cancerígenos y que incluso podrían provocar mutaciones en diversos animales.
Para evitar la contaminación de las aguas por estas sustancias, Ecologistas en Acción ha pedido que se evite la escorrentía en caso de riego o de tormentas con vegetación intermedia entre la zona de uso y los embalses de captación.
Además, “la mejor solución” para Ecologistas en Acción de Zamora pasaría por evitar el uso de estos productos, especialmente del glifosato, y encontrar soluciones alternativas para la agricultura.